La tasa de gripe se ha duplicado en Balears en el transcurso de dos semanas y ha pasado de los 96,24 casos cada 100.000 habitantes a los 180,79 casos, según los datos de la Red Centinela de Gripe de la Conselleria de Salud, Familia y Bienestar Social.
La incidencia de la gripe en las islas continúa sin embargo 52 puntos por debajo de la tasa estatal que está en 232,57 casos cada 100.000 habitantes.
La evolución del incremento de la tasa de gripe ha sido constante en las últimas semanas, de los 96,24 casos detectados en la quinta semana de control de esta campaña (del 28 de enero al 3 de febrero), cuando alcanzó la consideración epidémica, a los 166,37 casos de la sexta semana (del 4 al 10 de febrero) y los 180,79 de la séptima semana (del 11 al 17 de febrero), que son los últimos datos disponibles.
En cuanto a los datos nacionales, en la semana séptima, diez redes centinela de las comunidades señalan una evolución creciente de su actividad gripal, según datos del Sistema de Vigilancia de la Gripe en España (SVGE).
Algunas redes permanecen claramente en la fase de ascenso de la epidemia como es el caso de Andalucía, Balears, Canarias, Castilla La Mancha, Castilla y León.
En Valencia, Madrid y La Rioja se observan signos de estabilización. Navarra, Ceuta y Melilla señalan fluctuaciones al alza en sus tasas de incidencia de gripe, después de haber iniciado una estabilización o haber alcanzado el pico de la onda en semanas previas.
En Cataluña y Cantabria podría haberse alcanzado el pico de máxima incidencia de gripe en la semana sexta, y Aragón y Asturias se sitúan en fase de descenso de la onda epidémica por segunda y tercera semana consecutiva, respectivamente.
La difusión de la enfermedad es epidémica en quince redes centinela (sin cambios respecto a la semana previa), además de en Galicia y Murcia. Sólo en Ceuta se observa un nivel de difusión esporádico. Siete redes centinela señalan un nivel de actividad alto y el resto medio.
La actividad gripal se sigue asociando a una circulación mayoritaria de virus de la gripe B en la mayoría del territorio sujeto a vigilancia, excepto en Ceuta que se identifica una circulación de virus AH1N1 pdm09.
La tasa global de incidencia de gripe en la semana séptima es de 232,57 casos por 100.000 habitantes y se mantiene una evolución creciente, con cierta tendencia a la estabilización, pero sin que se pueda decir todavía que se ha alcanzado el pico de la onda epidémica de esta temporada.
Se señala un nivel medio de intensidad de actividad gripal, un nivel epidémico de difusión y una evolución creciente.
En cuanto a la evolución por grupos de edad, se observa un incremento significativo en las tasas de incidencia de gripe en el grupo de 15-64 años, mientras que en el resto de grupos de edad, menores de 15 años y mayores de 64 años, la incidencia de la enfermedad tiende a la estabilización.