La oposición está decidida a no dar tregua al Govern en el caso de la muerte de Alpha Pam, el senegalés que murió en sus casa de tuberculosis por no haber recibido la atención sanitaria adecuada, según denuncia la oposición. El Govern lo niega y asegura que Pam fue atendido en tres ocasiones, si bien más adelante no siguió el tratamiento que le había mandado el médico.
Lo que sí está claro es que la muerte del senegalés ha provocado una tormenta política de primer orden en la que la oposición ya pidió ayer abiertamente la dimisión del conseller de Salut, Martí Sansaloni.
Las críticas
El socialista Vicenç Thomàs denunció que se están poniendo los intereses económicos por encima de la salud de las personas y reclamó al Govern que de marcha atrás en la política de no atención a los sin recursos, que además comenzó en mayo de 2012, antes de que se aprobará la ley nacional.
Fina Santiago, diputada de Més, anunció que han presentado una pregunta a la Conselleria para saber a cuántas personas se ha cobrado por la atención en urgencias. «Pensamos que son centenares», dijo.
La portavoz el PP, Mabel Cabrer, lamentó la muerte del inmigrante, pero aseguró que si Vicenç Thomàs no hubiera llevado la sanidad a la ruina ahora no sería necesario adoptar según qué medidas.