El Govern que dispone de la mayor mayoría más cómoda para sacar adelante sus proyectos en el Parlament ha recurrido en 23 ocasiones a la figura del decreto para sacar adelante sus leyes. El próximo martes se celebrará el que, con toda probabilidad, será el último pleno del verano y también lleva un decreto ley para modificar la legislación y dar más tiempo para legalizar urbanizaciones en zona residencial que no cuentan con red de alcantarillado.
Se trata de un pleno extraordinario, como el que se celebró a principios de julio, y en el que también se convalidaron tres decretos del Ejecutivo, entre ellos el que permite a los hoteles de la Platja de Palma la ampliación de plazas a cambio de elevar su categoría.
El anterior Govern sólo recurrió en 8 ocasiones al decreto ley (que luego se puede tramitar, o no, como ley ordinaria) durante cuatro años. El actual comenzó a gobernar hace dos y ya lleva 23. Para el portavoz adjunto del PSIB, Vicenç Thomàs, «es un ejemplo claro del autoritarismo y la falta de debate que marca la gestión del president Bauzá». Esa es la misma opinión de Antoni Alorda (de Més) que, a la vuelta del verano, intentará promover una reforma del reglamento de la Cámara para limitar el uso del decreto ley. «Es excesivo», dice.
Sin duda alguna, es la codicia legislativa, promovida por intereses muy, muy, muy particulares. Se legisla para unos pocos y eso hace que se redacten Decretos leyes como churros!!!