La Dirección General de Salud Pública y Consumo inspecciona como cada verano 158 zonas de baño en Baleares distribuidas en 32 municipios en el marco de las medidas de control de calidad medioambiental de las aguas que se aplican del 6 de mayo al 7 de octubre.
En estas zonas de baño (18 de Mallorca, 8 de Menorca, 5 de Eivissa y 1 de Formentera) hay 194 puntos de muestreo y se toman muestras cada semana en 84 zonas de baño de Mallorca, 30 de Menorca, 38 de Eivissa y 6 de Formentera, informa la citada Dirección General dependiente de la Consellería de Salud.
Los controles consisten en un análisis del agua que incluye una inspección visual para evaluar las condiciones de limpieza e higiene.
Además, en las playas se hace una vigilancia visual de la arena para detectar si hay vidrios, plásticos, caucho, maderas y restos orgánicos.
Las muestras de agua se analizan en los laboratorios de Salud Pública de Mallorca y de Eivissa y el 99 % de los resultados determinan que las aguas son aptas para el baño.
Cuando un punto de muestreo supera los valores establecidos para que el agua sea apta para el baño se toman muestras complementarias para confirmar el incumplimiento y se informa el ayuntamiento correspondiente y a la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio.
De esta manera, se puede determinar la causa y tomarse las medidas correctoras necesarias para proteger la salud de los bañistas.