«Me vais a perdonar, pero no voy a hacer declaraciones, ya lo haré cuanto sea el momento». Esto es lo que dijo la exalcadelsa Marienna Sánchez-Jáuregui tras declarar como imputada por el caso de las facturas irregulares del grupo Prensa Pitiusa ante el juez José Espinosa, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Eivissa. Acuciada por la prensa, Sánchez-Jáuregui añadió acerca de su declaración: «Entiendo que sí que ha ido bien, yo he dicho la verdad».
La exalcadelsa y aún concejala de Vila comenzó su declaración pasadas las dos y media de la tarde y salió del juzgado poco antes de las cuatro de la tarde.
Previamente, y a lo largo de toda la mañana, el juez tomó declaración en calidad de testigos por el caso de las facturas irregulares a cinco personas: los tenientes de alcalde Juan Daura y Lina Sansano; el exjefe de gabinete de Sánchez-Jáuregui cuando se saltó a la luz el caso de las facturas irregulares a Prensa Pitiusa, Antonio Beneyto; la interventora municipal del Ayuntamiento de Eivissa; el propietario de Prensa Pitiusa y quien era el director de esta publicación en aquel momento.
Tan solo Juan Daura, que calificó la jornada como de «desagradable situación», se dirigió a los periodistas: «Yo he manifestado [ante el juez] lo que todo el mundo sabe, lo que ha pasado, y por lo tanto ahora es el juez quien debe decidir si sigue adelante o no». Por la despacho del juez José Espinosa pasaron los cinco testigos, que no llevaron abogado. El letrado de Sánchez-Jáuregui escuchó las declaraciones de todos los testigos, además de la de su cliente, que por ahora es la única imputada por este caso.