José Ramón Bauzá está mediando ante la dirección nacional del PP de Madrid para tratar de evitar que los cuatro senadores que se desmarcaron de la línea oficial del partido sean sancionados, según adelantó ayer la portavoz de los populares en el Parlament, Mabel Cabrer.
Llorenç Bosch, Josep Sala, Maria Antònia Garau y Gari Durán rompieron la pasada semana la disciplina de voto en el Senado y apoyaron una moción presentada por el socialista Francesc Antich en la que se pedía al Gobierno una moratoria en las prospecciones petrolíferas. La quinta senadora del PP, Joana Francisca Pons, votó con la mayoría.
Reunión
La dirección del grupo popular en el Senado se reúne esta mañana y es muy probable que hoy mismo se determine qué sanción se les impone a los senadores díscolos. Es aquí donde está interviniendo el president del Govern, ya que él mismo reconoció que había ordenado a los senadores del PP que votaron la moción del PSOE. Las sanciones pueden llegar a los 1.950 euros, que es la multa que se le impuso hace año y medio a un senador leonés por desmarcarse en una votación sobre las ayudas al carbón.
La portavoz del PP en el Parlament, Mabel Cabrer, destacó ayer la «valentía» demostrada por los senadores del PP y evitó entrar en polémicas con los representantes del PP de Canarias, que sí apoyan las prospecciones. «Nosotros no opinamos sobre Canarias y pedimos el mismo respeto», dijo