La alcaldesa de Vila, Virginia Marí, mostró ayer su predisposición para la suspensión de licencias urbanísticas en caso de que la anulación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) suponga la desprotección medioambiental de alguna zona. «Si vemos que queda desprotegido y que hay que hacer una suspensión temporal, se hará», comentó ayer la alcaldesa de la ciudad de Eivissa. En este sentido, la alcaldesa del Partido Popular puso de manifiesto que el ayuntamiento «tomará las medidas necesarias para que esté controlado».
Virginia Marí desconocía ayer por la mañana si había entrado en el Ayuntamiento de Vila algún proyecto urbanístico a raíz de la sentencia del Tribunal Supremo que anulaba el PGOU de Vila por un defecto de forma. «Alguno que otro habrá entrado, pero no he preguntado por si acaso», manifestó la alcaldesa, quien apuntó que dicha la normativa urbanística de la ciudad «todavía no está anulada».
«No es tan grave»
La alcaldesa de Vila quitó hierro a la anulación del PGOU «porque solo le faltaba un documento» y aseguró que «hay muchas zonas que están protegidas, tampoco puedes actuar como quieras porque hay otras normas y figuras que te impiden hacer según qué, por lo que la alarma no es tan grave, no le tengo miedo».
Virgina Marí confirmó que los técnicos y letrados del Consistorio ya están trabajando para ver qué solución escoge ahora la institución ante la suspensión del planeamiento urbanístico de Vila. «Estamos en contacto con el Consell, pero como no se ha publicado (la anulación del PGOU), tenemos un margen», apuntó la alcaldesa, quien destacó que existen «dos posibles caminos» que, sin embargo, no quiso desvelar. «Estamos trabajando para tomar la mejor decisión para los ciudadanos de Eivissa», insistió Virginia Marí, que espera «solucionar el problema lo antes posible».
Marí dejó claro que la suspensión del PGOU «no es solo un problema del Ayuntamiento» y urgió al Consell d'Eivissa a que aprobase y publicara el Plan General de 1987.