Abel Matutes Prats (Eivissa, 1977) es uno de los más firmes defensores de prolongar la temporada turística en Eivissa. La cara visible de dos de los hoteles con más éxito de la isla a nivel internacional, Ushuaïa Ibiza Beach Hotel y Hard Rock Hotel, cree que no se están haciendo «todos los esfuerzos» para incrementar la oferta de Eivissa en invierno, pero es optimista de cara a 2016, donde prevé una recuperación de mercados como el ruso y el alemán y un nuevo incremento en el gasto turístico. El vicepresidente ejecutivo de Empresas Matutes (GEM) y director general de Palladium Hotel Group critica que el impuesto turístico sostenible «ni es tasa ni es ecológica».
—¿Qué expectativas tiene Palladium Group Hotel para la temporada 2016 en Eivissa?
—Creo que va a ser una muy buena temporada. Tenemos que ver aún, pueden pasar muchas cosas, pero entre la diferenciación que ha conseguido Eivissa últimamente, la reactivación de alguno de los mercados como el español, que hasta hace poco estaba tranquilo y que además mercados competidores que nos habían quitado bastante clientela como era el norte de África, que lleva tres años mal y parece que no va a mejorar, incluso en Turquía, que es un competidor claro, y además el mercado ruso, que se está quedando sin sitios para veranear y que era un mercado que había caído mucho en Eivissa porque atraviesa una gran crisis, no descarto que también vuelvan a venir a Eivissa.
—¿Cómo está marchando la promoción en Fitur pueden avanzarse porcentajes de crecimiento?
—Mercados en Eivissa están fuertes casi todos, el español que estaba sufriendo se va a recuperar. Ninguno está flojo, otros que iban mucho a Turquía, como Alemania, pueden reforzar a Eivissa. Es pronto para hablar de porcentajes. Yo creo que en número de clientes no va a variar mucho respecto a la pasada temporada, pero sí ha incrementado un 29% el gasto turístico, y eso ha sido gracias a que han gastado mucho más los turistas. Tiene pinta de que va a ser una buena temporada turística y habrá mejoras sustanciales en el gasto y quizás en el número de turistas.
—¿Cómo marchan las reservas para los extremos de la temporada y qué novedades presenta el grupo al respecto?
—Estamos ahora mismo negociando una serie de grupos que nos permitirían abrir antes algunos hoteles como Hard Rock, pero no es el único. Este año la temporada cae demasiado pronto, si conseguimos una serie de grupos importantes conseguiremos abrir en Semana Santa y eso incrementará un mes la temporada, pero no está siendo fácil. Por tanto, aún no tenemos claro si podremos abrir para principios de abril o incluso finales de marzo. Ése es uno de los temas pendientes que tiene Eivissa: alargar un poco la temporada. Esperemos que poco a poco se vaya consiguiendo, pero para eso hay que incrementar una serie de ofertas en invierno que seguramente no estamos haciendo todo el esfuerzo para conseguirlo.
—Aena prevé un aumento en las conexiones del mercado nacional con Eivissa, ¿la conectividad es sin duda un factor fundamental?
—Ojalá muchas líneas aéreas empiecen a incrementar el número de vuelos con Semana Santa, que cae pronto, nos mejoraría bastante el mes de abril. Si generamos bastantes atractivos en invierno y principios de temporada, vendrán más turistas y automáticamente se irá animando el número de vuelos que vienen. No sabemos si es antes el huevo o la gallina. Si somos lo suficientemente proactivos y generamos suficiente oferta, acabará respondiendo la demanda, sino, siempre habrá estas temporadas tan marcadas y desgraciadamente una temporada de invierno muy larga. Es una pena porque el clima de Eivissa permitiría 8-9 meses de temporada fácilmente.
—¿En qué medida afectará a las empresas del grupo la ecotasa del Govern?, ¿se han planteado perdonar la tasa a quienes ya han hecho su reserva?
—Nuestro grupo nunca ha estado fuera de la legalidad. Tendremos que hacer lo que marque la ley, otra cosa es que nos guste más o menos. En un sitio como Balears que vive del turismo, y Eivissa principalmente, el turismo está haciendo que ‘bienvivamos', el gravar mucho tu gallina de los huevos de oro a veces la puede matar. Los países serios lo que hacen es lo contrario: es hacer más competitiva tu gallina de los huevos de oro. Por tanto, no puedo estar a favor. Otra cosa es que ni es tasa ni es ecológica. No es tasa porque no es finalista, y no es ecológica porque habían dicho que ya verán a qué lo destinan. Tampoco se distribuirá por islas. Yo sería bastante menos beligerante si dijeran que es una tasa turística destinada a mejorar el medioambiente a favor de los turistas. Entonces que dijeses los proyectos que hay y a mí me parecería, sin dar palmadas con las orejas, bastante más aceptable y además una tasa que permitiría mantener a largo plazo la sostenibilidad y la calidad del destino. Desgraciadamente, esto seguramente se va a ir a más enchufismo, y más enchufismo en Mallorca. Por eso me parece negativísima, sobre todo por cómo se va a aplicar.
—Los hoteleros también insisten en la necesidad, para que el turista repita, de que se mejoren infraestructuras, por ejemplo las de abastecimiento y depuración de aguas.
—Evidentemente. Pero, ¿cuánto se va a destinar para eso con lo que se recaude? Porque para eso ya se puso una tasa del agua y no se ha hecho nada. Pedimos que Eivissa reciba cosas que reviertan a favor de que el cliente repita en el futuro. A mí eso me parecería bien, pero es que gravan sin más.