La delegada del sindicato CSIF en Can Misses, Teresa Arce, acusó ayer a la gerencia del hospital Can Misses de no querer contratar el personal necesario para evitar el colapso en urgencias. Según Arce, los pacientes que esperan cama desde este servicio impiden que se pueda atender a otros que llegan. La representante sindical indicó que los pacientes tienen que esperar 4 horas de media para ser atendidos y pidió a la gerencia del hospital que habilite una planta «con personal» para atender estas esperas. Entre el miércoles y el jueves pasado, según la sindicalista, había 15 y 17 personas, respectivamente, esperando cama.
Por su parte, el gerente del hospital, Josep Balanzat, negó la situación de colapso y, aunque reconoció que hay picos, aseguró que en estos momentos «no hay ningún colapso» y que estas declaraciones se deben a que «los sindicatos han de hacer campaña». Además pidió que no se cree «una alarma social innecesaria». Según Balanzat, el personal de urgencias en Eivissa es «por ratio el más dotado de toda Balears».