El técnico de la Cooperativa de Santa Eulària, Joan Marí, asegura que la marca de calidad Oli d´E, a la que están adscritos 15 productores de la isla, va a tener la peor cosecha desde que se creó hace cinco años. Esta próxima campaña la marca de calidad no llegará a los 10.000 litros de aceite «cuando, normalmente, se están cosechando entre 15.000 y 20.000 litros». Lo que más ha influido, explica Marí, «es la sequía que tenemos desde el otoño del 2013». «Este año la recolección va a ser inferior que otras campañas, aunque hay pequeñas islas en las que la cosecha va a ser buena», asegura Marí.
Es el caso de productores como Miquel Guasch, de la Oleoteca Ses Escoles, que practica el cultivo ecológico y que va a tener una cosecha «regular, pero no va a ser un mal año después del año pasado, que se puede decir que fue normal. Hay que tener en cuenta que las cosechas se van turnando, si un año es muy bueno el siguiente va a haber menos fruto», asegura.
Regadío
Guasch explica que al ser el olivo un cultivo de regadío en Eivissa, «los árboles que no tuvieron el año pasado mucho fruto, lo tendrán este año». Sus olivares se han visto afectados negativamente «porque llovió cuando estaban en flor» y la flor cae impidiendo que se pueda desarrollar un fruto. Sin embargo, explica, la arbequina, una de las variedades que se cultiva en Eivissa y que da un aceite excelente, «va a tener muy buena cosecha». Además, este año la plaga de la mosca les está afectando en esta parte de la isla «pero no más que otros».
Sin embargo, Joan Prats, Benet, no está de acuerdo con Guasch ya que la situación de sus olivos es muy diferente. Aunque han desarrollado mucha rama con el riego y aparecen con un aspecto bastante bueno, lo cierto es que «están sin un fruto y eso se nota en que el árbol está muy frondoso». Así nos lo cuenta este agricultor de la zona de Benimussa, que asegura que «muchos árboles no tienen ni una aceituna», como pudimos comprobar en la visita a su finca. «El año pasado tuvimos una muy buena cosecha aunque fue un año muy seco. Sin embargo, este año no hay aceitunas. Las pocas que había y sacaron flor no cuajaron», apunta Joan Benet.
Al contrario que Miquel Guasch, Joan Prats asegura que «la arbequina, que suele ser la más dura, no tiene fruto, aunque la picual tiene algo». En cuanto a las plagas, el agricultor asegura que son las mismas de siempre, «en concreto la mosca, que no hay mucha pero ataca a la poca cosecha que queda».
LA NOTA
¿Habrá indemnizaciones?
Los agricultores no saben de momento si los organismos públicos competentes en la materia tienen previstas indemnizaciones para los casos como los de Joan Benet en Benimussa en los que la recolección va a ser casi nula.
De hecho, según el técnico Joan Marí, algunos agricultores van a optar por no hacer ni siquiera la cosecha por la poca cantidad de fruto que tienen en estos momentos en los olivos.
No obstante, muchos de los agricultores tienen seguros privados para sus campos, «aunque no sé todavía si se nos va a indemnizar de alguna manera. Tendremos que empezar a mirarlo», asegura Benet.