Una vez dejada atrás toda la vorágine de las fiestas navideñas y el ajetreo que esos últimos días del año conllevan para todos nosotros por las compras que realizamos para las diferentes celebraciones de tan señaladas fechas, las paradas y puestos del Mercat Nou de Vila recuperan de nuevo la normalidad en sus cotidianas actividades y en las relaciones del día a día con sus clientes.
Dicha calma puede apreciarse a simple vista, ya que bastantes de los negocios del Mercat Nou aparecen aún con sus persianas cerradas, pues en muchos de los establecimientos aprovechan estas primeras semanas del nuevo año para tomarse un merecido descanso.
No obstante, para el usuario avezado que recorre las calles del mercat es precisamente en estas fechas cuando se consigue sacar más provecho del atractivo abanico de oportunidades que se nos abren a la hora de adquirir buenos productos y de excelente calidad a precios que se encuentran muy por debajo de lo que estaban hace tan sólo unas semanas.
Calçots y bròquils
Aunque la época de calçots comienza con los primeros fríos del mes de noviembre, la temporada del calçot propiamente dicha no se abre de forma oficial hasta finales del mes de enero con la popular calçotada de Valls (Tarragona), que se celebra cada último domingo de enero. Aquí en Ibiza, los amantes y aficionados a degustar esta deliciosa y suave cebolleta dulce tienen ya la posibilidad de empezar a adquirirlas en el Mercat Nou para deleitarse con su exquisito e inconfundible sabor cuando se cocinan a la manera tradicional, sobre las vivas llamas del fuego y acompañadas de la típica salsa romescu.
Así las cosas, José Antonio Blanco, de la parada de Frutas y Verduras Toni, nos comentó que «estos calçots no son los mismos que en Cataluña, que son los que se consideran como originales. Los que tengo son de una variedad que se está cultivando desde hace ya un tiempo aquí en Ibiza. Estos son de los primeros del año en llegarnos y están a 1,60 euros el manojo».
Al seguir con nuestro paseo en busca de verduras frescas nos topamos con una llamativa variedad de crucífera que responde al nombre de bròquil o brocoflor, que capta nuestra atención enseguida por su hermosa y sorprendente tonalidad entre rosácea y morada. Sonia Gómez, de Verduras y Frutas ecológicas L´OU, indicó que «el bròquil es un híbrido entre la coliflor y el brócoli. Posee un sabor a medio camino entre ambas hortalizas y se cocina de igual modo que cualquiera de ellas. Aunque el bròquil original es de color verde, existen también otras variedades que son amarillas o, como en este caso, de tonos más morados. Su precio es de 3 euros por pieza».
A la hora de incluir algo de carne en la cesta de la compra nos dejamos guiar por nuestro instinto, por lo que nos decidimos por un buen corte de vacuno. En este caso, nuestra elección recae sobre un suculento chuletón madurado de vaca frisona que hallamos a 23’965 euros el kilo en la Carnicería Ni Mata ni Engorda. Otra delicia que nos presentan en este especializado establecimiento como una de sus novedades son unas magníficas hamburguesas de carne de Angus con crepineta, que ponen a nuestro alcance al precio de 10,98 euros el kilo.