La isla de Ibiza ha salido de la situación de sequía después de que haya alcanzado valores estable durante tres meses consecutivos. De esta manera se anulan las restricciones impuestas por el Govern en junio de 2015 con el decreto de sequía extraordinaria.
La escasez de lluvias durante el último mes ha provocado que el nivel de los acuíferos de la isla de Ibiza haya disminuido en tres puntos porcentuales en relación al mes anterior, pasando de estar al 85% a finales de febrero –el mejor dato registrado en los últimos diez años– al 82% al terminar el mes de marzo.
En comparación con la situación del año pasado, los acuíferos de Ibiza han pasado de presentar una capacidad del 47% a finales de marzo de 2017 al 82% actual, 35 puntos porcentuales más.
En cuanto a las seis masas subterráneas en las que está dividida la isla, sólo dos de ellas han aumentado su nivel durante el último mes en pasando del 86% al 88% la del Pla de Sant Antoni y del 92% al 93% la de Jesús, mientras que la de Cala Llonga se mantuvo en el 65%. Las otras tres, en cambio, se encuentran en niveles inferiores al mes anterior, siendo la de Roca Llisa la que ha sufrido un mayor descenso, ya que a finales de febrero presentaba un nivel de 97% y ahora es sólo del 70%.
En Formentera, el nivel de los acuíferos se ha mantenido en el 60%, el mismo porcentaje que el registrado en el mes anterior, mientras que las reservas hídricas en el conjunto del archipiélago balear se han mantenido en el 75%, porcentaje que representa un aumento de 23 puntos porcentuales respecto al mes de marzo año pasado.
En cuanto al índice de sequía, todas las unidades de demanda de Baleares continúan en situación de normalidad, aunque hay ligeros descensos del índice en todas las unidades, excepto en la del levante de Mallorca y en Menorca, donde ha habido un aumento poco significativo. Los valores actuales son similares a los de marzo de 2015 y superiores a los de marzo de 2016.
La previsión del Govern es que los recursos hídricos disminuyan o se mantengan, según las lluvias que se produzcan durante el mes de abril. A partir de mayo, cuando las precipitaciones son más escasas, se espera que la capacidad de los acuíferos disminuya hasta el otoño, que es cuando vuelve a llover.
LA NOTA
Déficit de precipitaciones del 5% en Ibiza
Los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) reflejan que todavía hay un déficit interanual de precipitación del 4% en Menorca y del 5% en Ibiza. La isla de Mallorca, en cambio, tiene un superávit de lluvias
del 31%. Con estas cifras, la media de las islas se sitúa en el 26% de superávit. En general, por tanto, la situación es buena a nivel balear, con datos por encima de la media habitual para esta época del año en Mallorca y en Ibiza. La mayor de las Pitiusas continúa en la mejor situación de los últimos diez años, mientras que en Menorca los recursos se mantienen dentro de los márgenes normales.