Los hay de Marruecos, de Sudamérica, de los países del Este, de Malí, de Sudáfrica y por supuesto de España. Hombres y mujeres, de edades muy diversas y cada uno muy distinto entre sí. Sin embargo, a todos les une la ilusión por salir adelante e integrarse dentro de la sociedad a través de los cursos que imparte el Centro Betania de Cáritas en Ibiza.
Por ello, se han esmerado todo lo que han podido durante este curso académico estudiando y dando lo mejor de sí desde octubre a mayo. Y finalmente, el esfuerzo y la dedicación ha merecido la pena, viéndose recompensado ayer por la tarde cuando recibieron en el salón de actos de la Residencia Reina Sofía de Ibiza sus diplomas en un emocionante acto repleto de agradecimientos, buenos propósitos y merecidos reconocimientos.
En total ayer se dieron 120 diplomas correspondientes a un total de 16 cursos de asignaturas como inglés básico e inglés A1, castellano, informática, alfabetización o neolectura. Unas asignaturas que se imparten en horario de mañana y de tarde con el fin de llegar al mayor número posible de personas. No en vano, según explicaron ayer a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA desde Cáritas, la función principal de estos cursos «es que las personas que lo hacen puedan tener una herramienta más para conseguir su integración dentro de la sociedad y poder tener acceso a un futuro algo más esperanzador».
Perfiles muy diversos
En este sentido, los responsables del Centro Betania aseguraron que los perfiles de los alumnos es muy diferente según el curso en el que se hayan matriculado. Así, por ejemplo, en castellano la mayoría de los estudiantes son mujeres musulmanas «que llegan a España sin saber nada de nuestro idioma» o ciudadanos de países del Este de Europa o de países africanos «que necesitan saber el idioma para poder integrarse y optar a un trabajo». Mientras, entre los cursos de inglés e informática los demandantes son, fundamentalmente, españoles y personas que vienen de Sudamérica.
El acto de entrega de los diplomas volvió a estar presidido un año más por el director de Cáritas Diocesana, Joan Marí Torres, y el concejal de Benestar Social del Ayuntamiento de Ibiza, Joan Ribas. Además, entre el público asistente también se pudo ver a muchos familiares, sobre todo niños pequeños, que miraban con orgullo, satisfacción y devoción a sus padres, madres o hijos, recibir un diploma que reconoce el esfuerzo por integrarse en la sociedad ibicenca.
Una oración de Francisco de Asís perfecta para los tiempos que corren
Durante la entrega de los diplomas se leyó una oración de Francisco de Asís perfecta para los tiempos que corren. Dice así: «Señor haz de mi un instrumento de tu paz, que donde haya odio yo ponga amor, donde haya ofensas yo ponga perdón, donde haya discordia yo ponga unión, donde haya error yo ponga verdad, donde haya duda yo ponga fe, donde haya desesperanza que ponga esperanza, donde haya tiniebla yo ponga luz y donde haya tristeza yo ponga alegría. Haz que yo no busque tanto el ser consolado como el consolar, el ser comprendido como comprender, el ser amado como amar».