El Área de Salud de Ibiza y Formentera instala 283 nuevos puntos de lavado de manos en todas las camas de los hospitales de Can Misses y de Formentera.
El Hospital Can Misses contaba con 400 puntos con solución hidroalcohólica para el lavado de manos dirigidos a usuarios y personal sanitario que están distribuidos por las consultas externas, hospitalización, área quirúrgica, radiología, urgencias y paritorios.
Con esta medida se pretende prevenir la transmisión de enfermedades infecciosas. Junto a los dispensadores se han colocado unos pósters que tienen como objetivo difundir entre pacientes, familiares y personal sanitario la importancia de la higiene de manos como práctica segura y que reduce riesgos en la seguridad del paciente. Ahora se suman estos nuevos 283 puntos a pie de cama, 265 en Can Misses y 18 en Formentera.
La instalación de los dispensadores se trata de una iniciativa de la Unidad de Enfermedades Infecciosas y la Unidad de Seguridad del Paciente USP, impulsada por Cristina Martín, enfermera responsable de Enfermedades Infecciosas y miembro de la Unidad de Seguridad del Paciente (USP) y Ana Vila, enfermera de Recursos Materiales.
Alternativa al agua y jabón
La solución hidroalcohólica es un medio alternativo al método de agua y jabón, que lleva menos tiempo llevar a cabo, quince segundos frente a medio minuto, y que se puede realizar en cualquier lugar.
Desde el Área de Salud explicaron que la introducción de dispensadores con adecuada disponibilidad para el personal de salud, cerca de la cama de los pacientes, demuestra que los trabajadores sanitarios limpian sus manos significativamente más que cuando tienen que buscar un lavamanos disponible para el lavado de manos, por lo tanto esta medida aumenta la adherencia a la práctica de higiene de manos y es considerada como la mejor medida para reducir infecciones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda para mejorar la adherencia en la higiene de las manos del personal que trabaja en áreas con una elevada carga de trabajo y la necesidad de cuidados continuados al paciente, colocar una solución alcohólica para la antisepsia por frotación a la entrada de la habitación o en la cabecera de la cama.
La recomendación de la OMS contempla que hay cinco situaciones en la que se ha de realizar higiene de manos con soluciones con base en alcohol: antes del contacto con el paciente, antes de realizar una tarea aséptica, después del riesgo de exposición a fluidos corporales, después del contacto con el paciente y después del contacto con el entorno o vecindad del paciente. También es un indicador de calidad asistencial.