La Asociación Ocio de Ibiza explicó ayer que actuará de forma «contundente» contra las «voces sectarias» que reclaman cierres de establecimientos y frente a «posicionamientos radicales» contra la industria turística.
En un comunicado titulado ‘Basta ya', la agrupación que reúne a 37 establecimientos, entre hoteles, restaurantes y discotecas, considera que estas acciones tienen un «decisivo impacto» en la economía de la isla y en los sectores que son «las principales fuentes generadoras de empleo en Ibiza».
En esta línea, reclama a las instituciones que «no se dejen enredar por aquellos que hablan de erradicar todos los ruidos de las playas sea cual sea su origen», en referencia al comunicado de la plataforma Prou!, que pedía esta semana medidas contra la «ilegalidad» que suponen las discotecas «camufladas» de restaurantes en las playas.
Referente mundial
La asociación reclama a las administraciones apoyo «ante aquellos que criminalizan de forma generalizada el ocio como causa de todos los males», cuando, según destacan, el ocio de Ibiza «es un referente mundial» sin el que «se crearía un marco desolador, porque la isla no aportaría ningún valor añadido al turismo de sol y playa que también ofrecen otros destinos a precios más competitivos».
«Reclamamos a las instituciones que sean conscientes del daño que una minoría causa con sus mensajes al hacer que otros competidores se froten las manos y se rían ante nuestra pasividad. Basta ya de tanta insidia generalizada y de negatividad sin entendimiento», piden desde la agrupación.
También advierten a los políticos que no se hagan eco con fines electorales de aquellos que «hablan de prohibir, limitar, sancionar, erradicar y cerrar», porque, «muchos otros están despertando a esta situación».
«Muchos empezamos a rebelarnos. Una masa de ciudadanos residentes comienza a despertar, empresarios que aman la isla e incluso políticos que, ante tanta pasividad de unos y radicalidad unilateral de otros sin objetivo positivo, ven con estupor la falta de sentido habiendo tanto en juego», explica el presidente de la asociación, José Corraliza.
La agrupación, que inaugura una nueva etapa con una hoja de ruta para reactivar el sector y un «comprometido» código ético, señala que está «cansada» de decir que no defiende ilegalidades, y que rechaza el intrusismo y la proliferación sin medida de locales, «porque dañan el delicado equilibrio entre sociedad, autoridades y empresarios líderes en su sector».
Por todo ello, reclama a ayuntamientos y Consell un «diálogo serio y comprometido» para que «no se dejen arrastrar por una minoría que intenta crear una situación de riesgo infundada para Ibiza».
«Estamos en un momento que requiere consenso, altura de miras y entendimiento sobre datos y no sobre opiniones», añade Corraliza.
Por último, desde la agrupación remarcan que los 37 establecimientos asociados generan alrededor 4.500 puestos de trabajo directos y que cada año aportan e invierten cerca de 700.000 euros en la comunidad, a través de donaciones a entidades deportivas, eventos y organizaciones sin ánimo de lucro. «Lo lamentable es la ignorancia y el poco interés de algunos por no querer crear entendimiento y buscar soluciones. Lo alarmante es lo peligroso que puede llegar a ser crear ruido y caos en medios y redes sin saber realmente los riesgos de sus actos mientras fuerzan a políticos a errar con sus acciones», concluyen desde la asociación.