El movimiento ciudadano Epic acusó hace dos días al Ayuntamiento de Vila de tener cuatro viviendas municipales vacías en el barrio de sa Penya -una de ellas ocupada de forma ilegal- a pesar del problema de vivienda que sufre la isla. «Es totalmente surrealista y esperpéntico que existiendo una grave emergencia habitacional en la isla, y por ende en el municipio, el Ayuntamiento de Eivissa no haya efectuado las reparaciones oportunas en las viviendas municipales para su cesión en régimen de alquiler u otro tipo», criticaron.
Sin embargo, las viviendas de las que habla Epic fueron cedidas el pasado mes de agosto al Ib-Salut con el objetivo de que el acceso a la vivienda no sea una traba para los profesionales del sector sanitario. De este modo, se firmó un protocolo de actuación con el Servei de Salut en el que el Consistorio ponía a su disposición un total de siete pisos.
Cabe recordar que la Conselleria de Salut cuenta, de momento, con tres viviendas, de una o dos habitaciones máximo, y se prevé ceder el resto según las necesidades de los sanitarios. Estas están situadas en los barrios de Dalt Vila y Sa Penya; concretamente en la ronda Antoni Costa, calle Bon Aire y travesía de Sa Penya.
Lentitud en los trámites
Por su parte, desde el Ib-Salut explicaron que hay un médico de Atención Primaria interesado en uno de los inmuebles. «Tiene un contrato de refuerzo estival que se alarga, en principio, hasta final de año», concretaron.
En este sentido, dijeron que se encuentran en la fase de adquisición de mobiliario ya que, como especifica el protocolo firmado, el Consistorio entrega la vivienda en perfectas condiciones, pero sin muebles. «Los procesos en la administración pública son lentos, pero la idea es que se pueda ocupar antes de que acabe el año», subrayaron desde el Servei de Salut.
Asimismo, recordaron que en cuanto la compra de muebles esté hecha, se adecuará el espacio lo antes posible para que la persona que ha mostrado interés en ocupar uno de esos pisos pueda entrar a vivir.