El juez decano de Ibiza, Juan Carlos Torres, subrayó ayer los esfuerzos que están realizando «todos los actores para conseguir que a partir de la próxima semana se garantice una reactivación mínima de los siete órganos judiciales paralizados por el incendio del juzgado de Isidor Macabich» y advirtió que si antes de junio no está operativo el nuevo edificio de sa Graduada «la situación será difícilmente soportable».
Torres realizó estas manifestaciones tras revisar la evolución de los trabajos de apuntalamiento y vaciado del edificio judicial siniestrado por el incendio registrado el pasado 21 de enero.
Argumentó que entre todas las propuestas que se han barajado, «ninguna es óptima al cien por cien y se está avanzando en la alternativa menos mala para que la actividad judicial empiece a cobrar fuerza a partir de la semana próxima».
El juez decano confirmó que la distribución definitiva centralizará los juzgados de Instrucción y el de Violencia sobre la Mujer en la torre número 1 del edificio Cetis, quedando las dependencias aportadas por el Consell para los juzgados de lo Penal.
Las denominadas minioficinas que han venido funcionando hasta ahora con un funcionario y un teléfono «para mantener la conexión judicial» darán paso la semana que viene a unos juzgados con la mitad del personal, cuatro trabajadores, ya que los espacios disponibles no permiten más, explicó Torres, quien subrayó que «es fundamental garantizar la actividad de las causas urgentes y la operatividad del juzgado de Instrucción en funciones de guardia y del juzgado de Violencia sobre la Mujer.
Avance de las obras
La administración de justicia en Ibiza trata de recuperar el pulso y el juez decano subraya el éxito que sería que los juzgados estén operando, aunque sea a medio gas, cuando todavía no ha pasado ni un mes desde el incendio que arrasó dos plantas y afectó en mayor o menor medida el resto del inmueble. «Se está haciendo un gran esfuerzo para poder reconducir una situación absolutamente excepcional e inesperada», advirtió.
En el edificio siniestrado ya se ha apuntalado hasta la planta tercera y se han empezado a retirar y trasladar mesas y enseres que estaban presentes en el juzgado de Violencia sobre la Mujer.
Respecto a las obras en la futura sede judicial, el juez decano resaltó que «todas las obras tienen sus plazos». Añadió que el escenario pasa porque la obra se finalice en mayo y que el traslado esté realizado en junio. Un escenario diferente sería «difícilmente soportable», concluyó.