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Sant Antoni abre un expediente por extraer piedras de forma ilegal en Cap Negret

Los responsables del movimiento de tierras no han obtenido licencia por parte del Ayuntamiento. | Daniel Espinosa

| Sant Antoni |

El Ayuntamiento de Sant Antoni ha abierto un expediente de restablecimiento de la legalidad urbanística a los responsables de los movimientos de tierra y extracción de tierra en un terreno de la carretera Cap Negret, en frente del Marble Stella Maris.
Según explicaron fuentes municipales, el Ayuntamiento tuvo constancia de la situación a raíz de que el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) interpusiera una denuncia el pasado 17 de diciembre. «Fue al día siguiente, el 18 de diciembre, cuando (los responsables) pidieron la licencia para el arreglo de bancales en el Ayuntamiento», precisaron; una licencia que el Ayuntamiento no concedió.

En este sentido, Cristina Ribas, concejala de Urbanisme, precisó que «la licencia, que no se ha tramitado, será negativa porque el terreno está en suelo rústico».
Lo que sí que se conoce es que la denuncia llegó al Consistorio en enero y fue ya en el mes de febrero cuando un celador municipal se acercó al terreno para constatar que se estaban realizando los trabajos sin licencia.

De momento, se sabe que este expediente conlleva penalizaciones aunque estas no se conocerán hasta que concluya. Se sabe que el plazo de caducidad del expediente de restauración de la legalidad urbanística depende de lo que estipule la ley urbanística de cada comunidad autónoma que, en el caso de Balears, establece un año. «Lo que están haciendo es sin licencia, pero somos un poco lentos, es el problema que tenemos», apuntó Ribas refiriéndose a la lentitud con la que se tramitan los expedientes en el Consistorio por la falta de personal, aunque recordó que el celador que visitó este terreno se incorporó «hace poco» a la plantilla.

Por su parte, vecinos de la zona se quejan del estado que presenta ahora un terreno por el que, dicen, antes se podía pasear «tranquilamente» y ahora se ha convertido en una «zona industrial» llena de polvo, socavones, en la que no hay señalización y en la que hay una excavadora y un camión de carga que, hace unos días, seguían sacando piedras.

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