La economía balear continúa durante el primer trimestre del año en la senda de desaceleración que mantiene desde 2018 con un crecimiento del 2 por ciento interanual, dos décimas menos que el trimestre anterior (2,2 por ciento), según el informe 'Evolución Económica' presentado este miércoles por la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB).
Según ha informado la patronal, el informe puntualiza que la ralentización del crecimiento entre los meses de enero y marzo (-0,2 pp) ha resultado inferior a la del cuarto trimestre del pasado ejercicio (-0,3 pp), así como a la del tercero (-0,4 pp), lo que indica que la economía se desacelera a «un ritmo cada vez más suave».
Desde la CAEB han indicado que la pauta de desaceleración se ha extendido a los diferentes territorios insulares del archipiélago. En este contexto, Menorca ha experimentado la ralentización más acusada (1 por ciento) debido, fundamentalmente, al menor pulso que han evidenciado algunas de las actividades más representativas de Menorca. Así, apuntan que la marcha del empleo ha perdido fuerza tanto en la industria agroalimentaria (-7,1 por ciento), como en el comercio (-4 por ciento), actividades, ambas, que cuentan una importancia relativa mayor en Menorca que en el resto de islas.
Por su parte, la economía de Ibiza y Formentera ha experimentado una moderación de tres décimas en el ritmo de crecimiento (2,5 por ciento), que se aproxima gradualmente a la media regional. Ello se achaca, principalmente, a que estas islas están acusando en mayor medida la desaceleración del crecimiento en las ramas turísticas, pues estas actividades tienen un peso mayor en ambas islas que en el resto del archipiélago.
Desde la CAEB han asegurado que esta evolución se sitúa en sintonía con la trayectoria de las principales economías del entorno, ya que la zona del euro ha avanzado en el primer trimestre al mismo ritmo interanual que el trimestre anterior (1,2 por ciento), mientras que el crecimiento de la economía española apenas se ha acelerado una décima.
Entre las causas que explican la desaceleración del crecimiento desde el punto de vista de la demanda, la presidenta de la CAEB, Carmen Planas, ha señalado, principalmente, al consumo de los hogares, que en el primer trimestre ha crecido a una tasa estimada del 1,8 por ciento interanual, dos décimas menos que el trimestre anterior (2 por ciento).
«Ello se asocia a la moderación del proceso de creación de empleo y su efecto sobre la capacidad y la propensión al gasto de los hogares», ha indicado Planas, quien ha añadido que «este efecto se está viendo mitigado, en parte, gracias al aumento de los salarios», en referencia al incremento de los costes salariales registrado durante el pasado ejercicio en Baleares (3,4 por ciento), el más elevado del territorio nacional (1 por ciento).
SECTOR SERVICIOS
Desde el punto de vista de la oferta, según la patronal, la evolución de la economía balear responde, en gran medida, al crecimiento más moderado que se observa en el sector servicios, cuyo ritmo de avance para el primer trimestre se ha estimado en el 2 por ciento interanual, dos décimas menos que en el último cuarto del pasado ejercicio (2,2 por ciento).
Desde la patronal han asegurado que este comportamiento del sector servicios se atribuye, principalmente, al consumo privado y al menor dinamismo que se observa en las ramas más directamente orientadas al turismo tras los elevados niveles de actividad alcanzados en los últimos años.
En este sentido, durante el primer trimestre la afiliación de trabajadores ha crecido en las ramas más estrechamente vinculadas a la actividad turística a un ritmo medio (0,4 por ciento) más moderado que el trimestre anterior (1,9 por ciento) e inferior a la media regional (2 por ciento).
INDUSTRIA Y CONSTRUCCIÓN
«La construcción ha experimentado la desaceleración más acentuada, aunque se mantiene como el sector que más crece en Baleares», ha señalado la presidenta de CAEB en referencia a la pérdida de cinco décimas en el ritmo de crecimiento de la construcción durante elprimer trimestre hasta situarse en el 4,3 por ciento interanual, una evolución que ha asociado «con el proceso de recuperación en el que aún se encuentra el sector».
Al mismo tiempo, la industria balear ha cedido dos décimas en el ritmo de avance durante el primer trimestre hasta situarlo en el 1 por ciento, un hecho que, según Planas, se produce a «consecuencia de la trayectoria descendente de la producción industrial, que ha retrocedido por segundo trimestre consecutivo».
La presidenta ha señalado que «la actual coyuntura económica no está exenta de riesgos», entre los que ha destacado «las tensiones geopolíticas y comerciales que afectan al comercio y al precio del petróleo, del cual el sistema energético es altamente dependiente; el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea y la ralentización de las economías del entorno, que afectan a la demanda turística; y el progresivo debilitamiento de las expectativas de los hogares y las empresas».
Planas ha recalcado que desde la CAEB creen que es «necesario un gran pacto público privado para la modernización y la transformación productiva de la economía de Baleares, y que es preciso recordar a los representantes políticos la necesidad de situar, de maneraclara y evidente, a las empresas, y en especial, a las pymes en el eje central de las políticas económicas, porque no solo se está desacelerando la economía sino que a la vez, la creación de empleo está también perdiendo empuje».