La ola de robos que tiene como objetivo las máquinas tragaperras se ha reactivado nuevamente afectando en este caso al bar El Cruce de Sant Rafel.
Los maleantes aprovechan a entrar en los locales por la noche, actúan con extrema rapidez y en pocos minutos revientan las máquinas tragaperras, se llevan la recaudación y, en algunos casos, también el dinero que queda en las máquinas registradoras.
Por ejemplo, en las imágenes de la cámara de seguridad del bar de Sant Rafel se puede observar como pocos minutos antes de las cuatro de la madrugada dos ladrones entran al local a cara tapada y cubiertos con sendas capuchas para atracar las máquinas tragaperras, destrozan la parte inferior o las abren, se hacen con la recaudación de la misma y escapan sin ser identificados en menos de 40 segundos.
Este no es un caso aislado. Con este mismo método ya han entrado a robar en una veintena de establecimientos de Ibiza en los últimos meses, entre los que se encuentra el Bar Can Toni de Ca na Negreta, el S'Hort Nou, el bar Toben de Sant Antoni o El Bienestar.
La Guardia Civil continúa investigando estos robos, pero aún no hay detenidos.