Completamente arrasado por las llamas. Así acabó ayer un taxi que a primera hora de la mañana ardió junto a la parada de taxis ubicada en la entrada del núcleo urbano de Sant Miquel.
El suceso se desencadenó minutos antes de las 07.20 horas y generó un sobresalto entre los vecinos de la zona ya que las llamas cobraron una gran envergadura.
Hasta el escenario del aparatoso incendio se desplazó una dotación de cuatro bomberos, así como Policía Local de Sant Joan.
Los bomberos sofocaron las llamas que no fueron más allá del vehículo, una monovolumen Dacia que quedó siniestro total.
Según indicaron desde el Parque de Bomberos, en el momento del incendio no había nadie en el interior del vehículo.
Las primeras investigaciones apuntan a un fallo en el sistema eléctrico como el origen de un incendio que sobresaltó a los vecinos que transitaban a primera hora de ayer por Sant Miquel y que tomaron imágenes del vehículo convertido en una bola de fuego.