El Ayuntamiento de Eivissa confirmó ayer que han adquirido nuevas señales de indicación de acceso al barrio de la Marina para el invierno, si bien por el momento no han trascendido las características y detalles de las mismas.
Cabe destacar que la Federación de Comerciantes La Marina-Puerto de Ibiza criticó a principios de esta semana que aún continúen visibles las señales que alertan de que se trata de una zona de acceso restringido a vehículos pese a que se puede circular sin temor a ser multado desde el pasado 1 de noviembre y hasta el próximo 30 de abril ya que en este periodo no está vigente el acceso controlado a la zona (Acire).
Desde el Ayuntamiento de Eivissa precisaron ayer que la política del área de Mobilitat del Consistorio es «trabajar en una ciudad limpia y sensible y apostar, en la medida de lo posible, por políticas que favorezcan la peatonalización de los espacios», al tiempo que recalcaron que «es importante ser flexibles y escuchar las peticiones, especialmente de los residentes».
Veinte minutos
Sobre las quejas de los 20 minutos de entrada cuando está vigente la zona Acire en verano, desde Vila consideran que este periodo de tiempo «permite armonizar los intereses de vecinos y comerciantes ya que favorece la rotación y el dinamismo de vehículos en la zona». En este sentido, señalaron que el mes pasado circularon por la Marina un total de 4.000 coches y la zona no llega a 100 plazas de aparcamiento: «Está claro que el problema no es el acceso en vehículo rodado a la zona. Las plazas son limitadas, el espacio pequeño y es importante que no se alargue el tiempo en el que los vehículos estacionan».
En cuanto a que se cobre la hora de zona azul entera cuando está en vigor el Acire y únicamente se puedan entrar y parar 20 minutos, desde el Ayuntamiento recalcaron que incrementarán los esfuerzos de cara a la próxima temporada «para que nadie pague de más en la zona azul. Hemos recibido estas quejas y se está trabajando para que la próxima temporada la información sea óptima».
Desde el Ayuntamiento defienden la restricción de acceso a la Marina en temporada ya que «la prioridad es ponerle las cosas fáciles tanto a vecinos como a comerciantes. Es importante que la gente vuelva a La Marina, que sea un barrio cómodo, vivible, que la gente regrese a ella y, a ser posible, pueda vivir todo el año. Por eso, en verano, se prioriza que los vecinos puedan aparcar y dejar el coche cerca de su casa», precisaron e incidieron de nuevo en que no es una restricción «rígida» ya que se permite el acceso libre durante 20 minutos mientras esté vigente la zona de acceso restringido de la Marina en temporada.