La detención de un individuo la madrugada del domingo que se enfrentó a los policías después de tratar de huir de un control y desnudarse en la vía pública, es el último del centenar de arrestos que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han realizado en Ibiza desde el decreto de estado de alarma, el pasado 15 de marzo.
Ayer, la isla de Ibiza se adentró en la denominada fase 1 de desescalada, tras dos meses de confinamiento, incluidas dos semanas de confinamiento total. Según el recuento de los datos facilitados durante este periodo por la Delegación del Gobierno y los ayuntamientos de la isla, la cifra de detenciones por desobediencia asciende a más de un centenar, varias de ellas de una misma persona reincidente, y más de 2.200 denuncias por desobediencia.
El grueso de las detenciones, más de 70, se produjeron en abril. La inmensa mayoría de los arrestos los realizó la Policía Nacional y son personas que fueron interceptadas por la calle sin un motivo justificado y que ya acumulaban varias denuncias.
Detenciones sonadas
Entre las actuaciones figuran casos como el de un ciudadano belga que organizó una fiesta con Dj y catering privado en una villa de Sant Josep a la que asistieron una veintena de personas.
La participación en una fiesta y la resistencia fue el motivo también de la única detención realizada por la Guardia Civil en Formentera.
Entre las detenciones más sonadas, la de tres personas, un hombre y dos mujeres, por la agresión a un policía local de Vila en la playa de Talamanca. El hombre, un experto taekwondista, realizó al agente una técnica similar a un ‘mataleón'.