El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, presentó ayer las bases del plan para la reactivación económica, ambiental y social de Ibiza. Un documento en el que el gobierno insular ha trabajado con los demás grupos políticos de la institución (PSOE y Unidas Podemos) y con los agentes sociales (UGT, CCOO, CAEB y PIME). Marí agradeció la «implicación y responsabilidad que han mostrado todos los colectivos que han participado en la redacción del documento».
La institución calcula que destinará 50 millones de euros entre 2020 y 2023 a cumplir con esta hoja de ruta, a través de iniciativas que se trabajarán con los ayuntamientos, subvenciones y programas de impulso económico. La financiación se obtendrá de una reestructuración del presupuesto. el uso del superávit y contando con las aportaciones de las instituciones autonómicas, nacionales y europeas.
Medidas
Entre las líneas de acción propuestas, en materia turísticas se plantea un «plan de choque» que implica la redacción de un nuevo Plan Insular de Marketing o la diversificación y consolidación de nuevos productos turísticos.
Para dinamizar el comercio local se pondrá en marcha el programa Eivissa Reinventa para favorecer la digitalización del pequeño comercio. También se creará la Ibiza Film Office para atraer proyectos audiovisuales a la isla y se trabajará por impulsar el sector a nivel insular.
Se creará un reglamento de uso de la marca Adlib Moda Ibiza y se impulsará la profesionalización del sector. Asímismo se seguirá trabajando en las líneas de promoción del producto local y de ayudas a la reactivación del sector primario.
El documento también incluye las medidas de reducción de la presión fiscal que acordaron entre el Consell y los cinco ayuntamientos, que implican, entre otras, la suspensión de algunas tasas, el retraso del cobro de tributos o las líneas de ayuda a empresas y autónomos.
Para fomentar el desarrollo tecnológico se creará un Parc Bit en Sa Coma y se trabajará también en el impulso de las energías renovables mediante la modernización de las infraestructuras energéticas, las instalación de placas fotovoltáicas en todos los edificios del Consell o la instalación de puntos de recarga eléctrica mediante energía solar.
Se plantean también medidas de lucha contra el intrusismo, fomento de la cultura y atención a colectivos vulnerables.
«Se trata de un acuerdo de mínimos», señaló Marí, abierto a la ampliación que plantea unos objetivos «realistas y prácticos». Valoró que «los períodos de crisis se tienen que ver también como una oportunidad» y consideró que este es el momento de «enfocar las políticas públicas a consolidar nuevos sectores económicos complementarios al turismo.
EL APUNTE
El Consell reclama poder usar el remanente para impulsar el plan
El presidente del Consell reivindicó de nuevo la liberación del uso del remanente (que asciende a más de 80 millones de euros de los que podrá usar cuatro) para usarlo como activo en el plan de reactivación. «En una situación de crisis como la que vivimos es básico poder contar con unos ahorros que son de los ibicencos», reclamó.
La liberación de estos fondos supondría ser «más ágiles y más inmediatos» a la hora de poder impulsar medidas, valoró Marí, dado que son unos recursos a los que el Consell tiene acceso directo pero de los que la ley no permite disponer libremente. «Es frustrante no poder utilizarlos. Se ha planteado este cambio en todas las reuniones que hemos tenido con el Govern y la Felib, pero está tardando demasiado», valoró. Según Marí, la proximidad al ciudadano y la capacidad de reacción inmediata, son argumentos más que suficientes para justificar la liberación «cuanto antes» de estos fondos.