Albert Prats, exconseller insular de Medio Ambiente en la legislatura 2007-2011, descubrió el martes por la mañana un ánfora PE17 en el acceso a una cala entre la playa de Ses Salines y la Torre de Ses Portes. Resulta ser una típica ánfora ibicenca de la época púnica, de entre el año 0 y 50 d.C., de unos 2.000 años de antiguedad.
No aparecieron más objetos por la zona pero sí que hay restos de un muro por los alrededores.
El protocolo a seguir cuando se hacen este tipo de descubrimientos es coger las coordenadas y avisar a las autoridades pertinentes ( Guardia Civil, el Consell y los ayuntamientos), tal y como indicó la conservadora del Museo Arqueológico de Eivissa y Formentera (MAEF), Maria Bofill. Pero, en este caso, hubo que actuar de urgencia ya que el ánfora estaba situada en una zona de paso, muy transitada tanto por turistas como por residentes, así que el Consell permitió su retirada inmediata.
«La pieza está entera y en muy buen estado de conservación», detalló Bofill.
Fue un hallazgo de lo más raro y curioso, ya que este tipo de vasijas enteras suelen encontrase en barcos hundidos o en algún ambiente funerario.
Juanjo Marí, , Almudena García-Rubio y Glenda Graziani, de la Asociación Arqueológica de Eivissa y Formentera (ASEF), extrayeron y retiraron la pieza. Marí piensa que se encontró en esa zona tanto tiempo después dada la erosión de este último año. Graziani detalla que se trata de un tipo de ánfora que se utilizaba para transportar el vino que se producía en la isla.
El ánfora fue trasladada al Museo Arqueológico de las Pitiusas (MAEF).