La llegada de pateras a las costas de las Pitiusas y de Baleares, en general, es algo que cada vez es más habitual. Anoche fueron cinco las embarcaciones detectadas en el archipiélago –una en Ibiza–, y otra llegó por la tarde a la zona Ses Pesqueres Altes un lugar cercano a s'Estufador, en la costa de La Mola en Formentera. A estas hay que sumarles las dos que llegaron la noche del viernes al sábado –una de ellas también a Formentera–.
Una de las pateras encontradas.
Según informó la Delegación del Gobierno, un total de 66 personas migrantes, posiblemente procedentes de Argelia, fueron detenidas –61 por la Guardia Civil y dos por Policía Local–, tras haber llegado a las costas de Mallorca, Ibiza, Formentera y Cabrera en un total de seis pateras, que se sumarían a las 20 que se han registrado en Baleares a lo largo de este año 2020.
En el caso de la patera que llegó a Ibiza, lo hizo sobre las 04.30 horas del domingo en el muelle viejo del puerto. En esta ocasión con un total de siete migrantes que fueron detenidos y han dado negativo en las pruebas PCR.
Por la tarde se conoció la llegada de una nueva embarcación a Formentera. En este caso, la Guardia Civil había detenido a 12 inmigrantes y, al cierre de esta edición, seguía con el operativo de búsqueda. Según amplió hoy la Delegación del Gobierno, la Guardia Civil finalemnte detuvo a tres inmigrantes más llegados en esta patera. Por lo tanto, son 15 los migrantes detenidos de esa embarcación.
Esta nueva llegada se suma a la de la noche del viernes que desembarcó en la playa de es Cupina, con 14 inmigrantes, que fueron detenidos por la Guardia Civil.
De estos últimos 14, tras realizarles pruebas PCR, dos de ellos han dado positivo en COVID-19 y aislados bajo la supervisión de las autoridades sanitarias. También permanecerán aislados los otros migrantes a la espera de nuevas pruebas.
Cabe recordar que este año han llegado a las costas Pitiusas un total de siete pateras con, al menos, 76 inmigrantes. La primera fue el 2 de enero cuando once inmigrantes desembarcaron en la zona de es Cubells. Hasta el 22 de junio no se produjo ninguna otra llegada, también en Ibiza. A esta le siguió la de 17 inmigrantes que desembarcaron en Formentera el 29 de junio. El 25 de julio llegaron otros seis a Ibiza. A estas hay que sumar las tres ya mencionadas de este fin de semana.
Se mantiene la tendencia
El director insular del Estado, Enrique Sánchez, señaló que este aumento de llegadas de patera en los meses de verano «están dentro de lo esperado». «La llegada de este tipo de embarcaciones se disparó el año pasado a partir de agosto. Que ahora empiecen a llegar más, es un poco lo mismo que pasó el año pasado. Hasta agosto habían llegado dos o tres y al final fueron más de 20», explicó.
Pese a la situación actual de la pandemia del coronavirus, en lo tocante a la inmigración a las Baleares apenas hay variaciones. «Las condiciones de Argelia no han cambiado. Allí sigue habiendo los mismo problemas sociales y económicos y estas personas vienen en busca de una vida mejor. No miran si aquí la situación está mejor o peor por el coronavirus. Buscan una vida mejor hasta tal punto que se juegan la suya en el mar», aseguró.
Sánchez detalló que el perfil de los inmigrantes que llegan a las Baleares es bastante diferente al de los inmigrantes que llegan a la zona del estrecho o a las Canarias. En este caso se suele tratar de un hombre joven que no suele superar los 30 años, aunque ha habido alguna mujer y también menores. Además, señaló que no cree que exista un efecto llamada, ni que el hecho de que los CIEs estén cerrado sea un aliciente para ellos: «Es un efecto salida, ellos quieren dejar su país porque allí lo están pasando muy mal. Su intención es llegar a países francófonos en los que tienen familia o conocidos».
Por último, recordó que desde hace tiempo se producen este tipo de llegadas y que ya en 2005 se comenzaron a contabilizar. Si bien es cierto que fue a partir del año pasado cuando se produjo un fuerte incremento de llegada de pateras procedentes de Argelia, alcanzando un máximo histórico. Este aumento de llegadas también ha hecho que se incluya al archipiélago en los diferentes análisis que se hacen en España sobre la inmigración ilegal.