El Área de Salud de Ibiza y Formentera cumunicó este pasado lunes que durante este fin de semana han detectado un total de seis nuevos positivos leves, sin relación entre ellos, en las consultas de Atención Primaria de Ibiza.
A esta cifra hay que sumar dos inmigrantes que llegaron en patera el fin de semana y resultaron positivos tras las pruebas de cribado.
Por otro lado, se han dado dos altas, una en Ibiza y otra en Formentera con las que se alcanzaría la cifra de 203 altas, que suponen el 85,6% del total de contagios. Entonces, la cifra de pacientes activos se sitúa actualmente en los 22, de los que el 86,3% son leves o asintomáticos y sólo tres permanecen ingresados, sólo uno de ellos positivo.
Además, se cumplen 79 días sin contagios entre profesionales sanitarios y se alcanzan los 102 días sin lamentar fallecimientos en las Pitiusas.
En el conjunto de Baleares, la Conselleria de Salud informó ayer de que en todas las islas hay 327 casos activos de SARS-CoV-2, una cifra que se ha duplicado en los últimos cuatro días, ya que el miércoles pasado apenas 165 personas estaban enfermas.
Por otra parte, IB-Salut lleva el control de 491 personas, ya que este recuento incluye a personas con la infección por COVID-19 superada. El salto respecto al miércoles pasado también es significativo, pues para entonces había 306 personas en estas circunstancias. Y no sólo en este ámbito se disparan las alarmas, ayer se notificaron 87 hospitalizaciones, 35 más que los 52 notificados hace varios días. Aunque también hay que recordar que la mayoría de los ingresos se producen por causas sociales, no clínicas.
Desde Salud llaman a la calma pues aseguran que el aumento de contagios estaba dentro de lo previsto y lo achacan a que por una parte hay más movilidad, y por la otra se hace una labor importante de detección precoz. «Durante los últimos días se ha producido un incremento de comunicación de casos al Ministerio, que obedece a la labor del Centro Coordinador de COVID-19 de Atención Primaria», explican en un comunicado oficial.