Agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ibiza han abierto una investigación por la muerte de un médico de Can Misses, un anestesista que, según las primeras pesquisas, acabó con su vida ayer por la tarde tras la celebración de un juicio por un presunto delito de abusos sexuales a dos enfermeras.
El cuerpo sin vida del médico fue localizado a primera hora de la tarde en su vivienda y la inspección ocular apunta a una muerte voluntaria. Fuentes de la investigación remarcaron que será la autopsia la que determine las causas exactas de la muerte.
Juicio por la mañana
Poco antes del hallazgo de su cuerpo en su vivienda, la titular del juzgado de lo Penal número 1 de Ibiza había dejado visto para sentencia el juicio contra este médico, que se enfrentaba a una petición fiscal de dos años de prisión por delitos de abusos sexuales, unos hechos que habrían arrancado en 2013, según las enfermeras que lo denunciaron.
La vista se celebró a puerta cerrada y siguiendo estrictamente todos los protocolos de seguridad y prevención impuestos en los Juzgados a raíz de la pandemia del Covid. La acusación particular solicitó sendas penas de un año de prisión por cada uno de los delitos de abusos, así como una indemnización de 5.000 euros para cada una de las víctimas. En un principio, el Ministerio Fiscal no observaba delito, pero tras los testimonios de las víctimas cambió su criterio y se sumó a la petición de la acusación. La defensa del médico sostuvo que los relatos presentaban «inexactitudes» y solicitó la libre absolución de su representado.
El médico reconoció haber tocado a una enfermera pero rechazo las acusaciones de la otra denunciante.