La Guardia Civil ha denunciado por un delito contra la seguridad vial por alcoholemia positiva a la conductora que la tarde del sábado chocó con su coche contra una furgoneta en la que viajaban cinco personas, una pareja con sus dos hijos, ambos menores de edad, y una amiga. Los pequeños y la mujer que les acompañaba recibieron el alta hospitalaria, pero la pareja sigue ingresada por lesiones de gravedad.
El accidente ocurrió en torno a las 18.40 horas en la carretera de Santa Eulària, la EI-200, a la altura de la gasolinera de Can Musson, cuando la conductora de un Peugeot 207 invadió el carril contrario y chocó frontalmente contra la furgoneta en la que viajaba una familia residente en Ibiza.
El test de alcoholemia realizado a la conductora del turismo que habría desencadenado el siniestro arrojó un resultado positivo con una tasa penal (más de 0,60 mg/l). La mujer también resultó herida en el accidente y fue evacuada al Hospital de Can Misses.
La Unidad de Atestados de la Guardia Civil de Tráfico se hizo cargo de la investigación del siniestro que se saldó con media docena de heridos.
Dos heridos graves
Según informaron ayer desde la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, el conductor de la furgoneta Citroën, un joven de 30 años, permanace ingresado a cargo de la Unidad de Neurocirugía con varias fracturas vertebrales.
La pareja, una mujer de 27 años, ingresó a cargo de la Unidad de Cirugía General con neumotórax traumático. Las mismas fuentes indicaron que los pequeños, un niño de 6 años y su hermana, de 9, fueron atendidos de traumatismos y recibieron el alta. También recibió el alta la noche del sábado la mujer de 42 años que les acompañaba.