El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, reclamó ayer, con motivo del Día de Baleares, un «verdadero» Régimen Especial que reconozca la «singularidad» de las islas.
En su discurso, realizado a través de redes sociales tras suspenderse todos los actos institucionales, el presidente insular reconoció que Ibiza siempre ha sido una tierra «solidaria» y, desde la «lealtad y el respeto», reivindicó «aquello que nos corresponde».
En esta línea, insistió en la necesidad de que se entienda el «hecho insular» y que se «compense» como merece el hecho diferencial de las islas.
Marí apeló también al carácter «luchador y emprendedor» de las islas para enfrentar con «optimismo» el futuro e insistió en seguir actuando con «responsabilidad y con solidaridad».
Para ello, Vicent Marí reclamó «agilizar» la vacunación masiva y establecer los controles necesarios en puerto y aeropuerto para evitar «un nuevo repunte de contagios, cuando estamos a las puertas de la temporada turística».
El presidente de la máxima institución de Ibiza recordó que los esfuerzos están centrados en «salvar vidas y recuperar la salud».
«Si tenemos salud, podremos afrontar y superar la grave crisis social y económica que ha generado en nuestras islas la covid-19», manifestó.
Marí, que recordó al centenar de víctimas mortales que ha dejado la pandemia en las Pitiusas, lanzó un mensaje de esperanza para la recuperación «sanitaria, social y económica» de la isla con las ayudas económicas para compensar las «carencias de la insularidad».
Más autonomía
Por su parte la presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, hizo hincapié en su discurso por el día de Baleares en la necesidad de que la pitiusa del sur siga creciendo en autonomía.
Según Ferrer, «aún son muchos los temas de vital importancia para la isla que se ven afectados por las decisiones y los intereses económicos de otros territorios». Como ejemplo de estas injerencias de otras administraciones citó los fondeos y la movilidad marítima entre islas «que, para poder regularlos, dependemos de muchas otras administraciones que están sometidas a lobbies importantes que defienden su beneficio por delante de la protección del entorno natural de Formentera».
En este sentido, la presidenta insular también destacó el proyecto Formentera.eco que se aprobó conjuntamente por la ciudadanía y el sector empresarial de la isla «para evitar la saturación de vehículos en los meses de temporada alta».
Este proyecto «empezó a tener detractores, empresas de fuera que sólo veían en nuestro territorio la posibilidad de obtener cada vez más beneficios sin plantearse el futuro de los que queremos vivir aquí y de los que tienen que heredar lo que nosotros dejemos», recalcó.
Además de la protección del territorio, Ferrer hizo hincapié en la «fragilidad de nuestra economía», que ha quedado en evidencia en este año de pandemia.
Por eso, la presidenta de Formentera destacó la solidaridad entre las islas y la coordinación que ha habido y tiene que seguir habiendo entre administraciones para tratar de luchar contra la COVID y reactivar la economía. «Tendremos que trabajar de forma solidaria en el calendario de vacunación para que llegue primero a las personas más vulnerables y más expuestas y, después, lo más pronto posible al resto de la población ya que tenemos las esperanzas puestas en la inmunidad colectiva».
Para alcanzar este objetivo, Ferrer hizo un llamamiento a todas las administraciones «para hacer la fuerza necesaria para garantizar que lleguen las vacunas suficientes para que esto sea posible y podamos reactivar la libre movilidad y, así, nuestra economía».