Dos años de prisión y 700 euros de multa. Es la condena impuesta ayer por el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial a un hombre juzgado por un delito contra la salud pública tras ser detenido en un establecimiento de Ibiza con una pequeña cantidad de cocaína, 58 comprimidos de éxtasis y 5.855 euros.
El acusado reconoció los hechos ante el tribunal y ratificó el acuerdo de conformidad que previamente habían alcanzado su representante legal y el Ministerio Fiscal. El acuerdo recogía la suspensión de la pena de prisión durante un periodo de cinco años, medida de gracia que será automáticamente revocada si el condenado vuelve a delinquir.
Cocaína, éxtasis y 5.855 euros
Según el relato de hechos, V.G.G., de nacionalidad rumana, fue sorprendido por agentes de la Guardia Civil portando entre sus pertenencias una bandolera negra en la que le incautaron 0,761 gramos de cocaína preparados para su venta y 5.855 euros en billetes de 50, 20, 10 y 5 euros. Ya en el exterior del local los agentes procedieron a inspeccionar el vehículo del sospechoso. Durante el registro los agentes hallaron en la puerta del conductor dos envoltorios que contenían 50 comprimidos de MDMA, sustancias valoradas en 508 euros, y otros ocho comprimidos sueltos que le habrían reportado 60 euros.
Otros dos juicios
La sección segunda de la Audiencia Provincial también condenó ayer a dos años de cárcel a otro hombre juzgado por un delito contra la salud pública. El acusado fue detenido en Ses Salines con 30 pastillas de MDMA, 1,3 gramos de ketamina y 0,62 de cocaína. Ayer reconoció los hechos y ratificó el acuerdo de conformidad.
Por otra parte, el tribunal dejó visto para sentencia el juicio contra un hombre que fue detenido por la Guardia Civil tras ser interceptado en el Camí del Portixol, en Sant Antoni, con 100 comprimidos de MDMA valorados en 1.043 euros, 0,213 gramos de ketamina y 0,384 gramos de cocaína. La Fiscalía le reclama una pena de tres años y medio de cárcel.