El primer día de cierre perimetral de Baleares se vivió ayer con ajetreo en el aeropuerto de Ibiza, donde se operaron 36 vuelos. El cierre perimetral entró en vigor ayer oficialmente y se extenderá hasta el próximo día 11 de abril con la intención de frenar la expansión del coronavirus en las Islas Baleares. Se trata de una de las nuevas medidas acordadas tras detectar que la mejora de los datos epidemiológicos «se ha estancado» o incluso presenta una «ligera inversión de la tendencia», especialmente en Mallorca, y teniendo en cuenta de que las fiestas de Pascua generarán un incremento importante de los desplazamientos.
Cabe recordar que en estos días de cierre perimetral sí que están permitidos los desplazamientos entre islas, así como también las Baleares están abiertas al turismo extranjero. Para el resto, únicamente se permiten las salidas y entradas de Baleares hacia otras comunidades del país para atención sanitaria, el cumplimiento de obligaciones laborales, asistencia a centros de mayores y educativos, cuidado de personas mayores, menores o con dependencia, así como el regreso al lugar de residencia habitual.
También desde ayer y hasta el próximo día 11 de abril únicamente se permiten las reuniones y encuentros familiares y sociales de un máximo de cuatro personas en el interior público o seis en el exterior en el caso de Formentera y Menorca, y de cuatro en Ibiza y Mallorca, en espacios públicos, siempre que pertenezcan, como máximo, a dos núcleos de convivencia. No obstante, en espacios privados únicamente son permitidas las reuniones de un único núcleo de convivencia.
No están incluidas en la limitación prevista en este apartado las actividades laborales, las institucionales, las de transporte y las de los centros docentes. Sin embargo, se permite a las personas que viven solas reunirse con otra única unidad de convivencia. Igualmente, se autorizan las reuniones de personas menores de edad y de estudiantes mayores de edad con los progenitores, en caso de que vivan en domicilios diferentes, como podría ser en el caso de separación o divorcio, por ejemplo. También se permitirán las reuniones de personas con vínculo matrimonial o de pareja que viven en domicilios diferentes.
Cabe destacar que el aeropuerto de Ibiza tiene programados 438 vuelos desde ayer y el próximo lunes 5 de abril, Lunes de Pascua, según las previsiones difundidas ayer por AENA.
La reducción de los vuelos previstos para cada jornada, con respecto a la Semana Santa de 2019, oscilan entre el 32% y el 83% respecto a 2019.
Los domingos 28 y 4 de abril, con 54 enlaces cada uno, serán los días con más conexiones, mientras que el sábado 27 y el martes 30 tendrán menos tráfico aéreo, con 22 vuelos cada uno.
También se esperan 20 conexiones con Alemania y dos con Francia, que suponen una reducción del 66% y el 95%, respectivamente, en relación al mismo periodo de 2019.