El Ayuntamiento de Ibiza encargó, y pagó del bolsillo de los contribuyentes de la ciudad a través de un contrato menor, un Plan Estratégico de Turismo que ya había elaborado previamente la misma empresa a la que se adjudicó el encargo para el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad.
El Plan Estratégico para la reactivación del turismo cultural y patrimonial del grupo de ciudades patrimonio fue elaborado por la consultora Braintrust (la misma a la que Vila adjudicó el suyo cuatro días después de haberlo presentado), con la financiación de la Secretaría de Estado de Turismo, y preveía planes concretos de acción, con instrumentos y estrategias para aplicar de forma concreta en cada ciudad de las pertenecientes al Grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España. En este caso, además del documento general para el conjunto de las ciudades, la compañía adjudicataria realizó un anexo para la ciudad de Ibiza consistente en 19 páginas en las que, entre otras cosas, se analizaba el mercado turístico de la ciudad y las posibilidades de desarrollo tras la pandemia. Así, además de este análisis del sector, se incluían una serie de acciones a desarrollar para mejorar la experiencia de los visitantes.
Prácticamente idénticos
Una vez analizados ambos documentos, el que encargó y pagó Vila por su cuenta y el que realizó Braintrust para la ciudad de Ibiza en el marco del plan genérico para todas las ciudades y que pagó la Secretaría de Estado de Turismo, se puede determinar que son prácticamente iguales tanto en el análisis como en las acciones que se proponen. Entre otras cosas, ambos textos inciden en la necesidad de buscar la sostenibilidad del destino y en fomentar y explotar la identidad propia de la ciudad con productos tradicionales vinculados a la calidad.
Asimismo, insisten en la necesidad de que se profesionalice el sector turístico con acciones como la mejora de la empleabilidad de la población local, la creación de modelos de relación laboral dignos o incidir en la formación en el sector turístico.
Otras acciones en las que hacen hincapié ambos documentos es en el desarrollo de productos y servicios innovadores y en la digitalización del ecosistema turístico.
Diversas presentaciones
El Consistorio ibicenco no fue el único de los pertenecientes al Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España que presentó este año un plan Estratégico de Turismo, aunque prácticamente fue el primero en hacerlo (de hecho lo presentó incluso antes de contratarlo). Asimismo, fue uno de los pocos, junto al de Úbeda y el de Mérida, que utilizó una empresa externa para desarrollar este documento, aunque en los casos de la ciudad andaluza y de la extremeña la compañía no fue la misma que elaboró el plan estratégico de las ciudades patrimonio, como sí que sucedió en Vila.
Otras ciudades que presentaron en 2021 su plan de turismo fueron Ávila (el 15 de enero), Baeza (el 6 de mayo) y Cáceres (28 de septiembre). En este último caso, el propio ayuntamiento diseñó y redactó el documento.
Aprovechamiento
Asimismo, la ciudad de Tarragona también presentó Plan Estratégico de Turismo, concretamente el 30 de abril. En este caso la ciudad catalana fue la que mejor aprovechó los recursos del Grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España ya que implementó directamente el plan elaborado por la empresa Braintrust personalizado para cada uno de los destinos y financiados por Secretaría de Estado de Turismo, por lo que no tuvo que tocar ni un céntimo de sus arcas para contar con esta herramienta de futuro.Lo mismo sucedió con Alcalá de Henares, que dio por bueno el trabajo realizado para el conjunto de ciudades patrimonio por la empresa Braintrust y no vio la necesidad de volver a contratar ni a esa empresa ni a otra algo que ya estaba más que elaborado y listo para poner en marcha.
Las ciudades Santiago de Compostela, Segovia y Toledo tienen todavía vigentes sus planes estratégicos, por lo que no desarrollarán ninguno nuevo mientras dure su vigencia.