El responsable de ventas de Peix Nostrum, Pere Varela, se mostraba ayer preocupado por las pocas jornadas que quedan a la flota de barcos de arrastre de la cofradía de Ibiza.
Una flota de tres barcos a las que solo les quedan 30 jornadas de pesca, a repartir entre las tres embarcaciones, hasta final de año. Hecho que pone en jaque el abastecimiento de pescado para la campaña de Navidad. «A día de hoy solo nos quedan 10 días para poder faenar en los próximos dos meses», se quejaba ayer Varela, que advierte de que «si no podemos faenar más de 10 días no habrá pescado para la campaña de Navidad». Este hecho, explica Varela, «lo que provoca son subastas al alza y subidas de precios».
Según la normativa europea, los barcos de arrastre de la cofradía de Ibiza solo pueden faenar durante 510 jornadas durante este año, a repartir entre las tres embarcaciones. De esta manera, a falta de dos meses para que termine el año, los pescadores se encuentran ante el dilema de tener que elegir con acierto las jornadas en las que faenar hasta final de año. Ahora les toca sopesar si el riesgo de esperar a diciembre, «el mejor mes del año», según Varela, con el riesgo a que entonces no puedan salir por las condiciones meteorológicas les vale la pena, o si en cambio les conviene más consumir las jornadas que les quedan durante el mes de noviembre.
Solución «muy difícil»
En este sentido, el director general explicó que el Plan de Gestión del Mediterráneo «es para aguas profundas y atañe a los barcos de arrastre: Es un reglamento europeo, no obstante estamos contentos con la reacción del sector que ha sabido adecuarse de manera espectacular a estas medidas tan restrictivas». Sobre las características especiales de la pesca en las Pitiusas y la posibilidad de conseguir un trato igual de especial en Europa, Mercant reconoció que «es muy difícil, por decir imposible».