A medida que el calor de las brasas se intensificaba, los invitados a comer una sustanciosa torrada empezaron a ocupar sus sillas en una mesa llena de anécdotas laborales.
Entre risas e historias, parte del personal del servicio de limpieza pública y recogida de basuras celebró este sábado su particular festividad de su patrón, San Martín de Porres, popularmente conocido como Fray Escoba. Esta fiesta, cuya celebración oficial es el día 3 de noviembre, se conmemoró este sábado con una comida de hermandad.
«Soy uno de los principales impulsores de este festejo. Creo que ese espíritu solemne se ha perdido y hay muchos trabajadores que prefieren venir a esta reunión que a la celebración que organiza el comité de empresa», destacó Constantino Larroda.
Este hombre, jubilado desde hace dos años, estuvo más de 30 años en el servicio de limpieza pública. Según Constantino, el compañerismo y la solidaridad entre ellos perdurará siempre.
«Por este tipo de iniciativas, muchos compañeros me dicen que yo creé el espíritu de Fray Escoba. Por este motivo, este encuentro es como un pequeño homenaje que me hacen», explicó Constantino con un semblante de felicidad. Enfrente de él, los trabajadores José Luis Hortelano y Juan de Dios Castillo, dos hombres que han estado formando parte del servicio de limpieza municipal más de 30 años.
«Estas comidas son una alegría para nosotros. Nos gusta mucho vernos y ponernos al día», subrayó Juan de Dios. Este trabajador, todavía en activo, lleva alrededor de 30 años trabajando en el sector, profesión que, según José Luis Hortelano, se debería desarrollar siempre bajo las mejores condiciones laborales. «Representamos a un sector que es esencial. Se ha demostrado, cada día, a lo largo de la pandemia», subrayó.
Por este motivo, la comida de este sábado también es una manera de poner en valor la labor que día tras día realizan estos profesionales. Para ambos empleados, el servicio de limpieza pública de Ibiza atiende muchos ámbitos con problemas que se deberían solucionar «urgentemente». Sin duda, Hortelano hacía referencia a las dificultades derivadas de la red de alcantarillado en la isla. «Es importante que las administraciones inviertan en solventar esta problemática. No puede ser que la isla se inunde cada vez que caigan cuatro gotas», puntualizó José Luis.
El Abuelo
Más de una decena de personas, entre ellas Virgilio Albarañez, alias El Abuelo, el jubilado más longevo de la mesa, empezaron a recordar anécdotas e historias de sus años en el servicio. Todos ellos franqueaban una simbólica figurita que estaba en medio de la tabla, sobre un servilletero: la imagen de Fray Escoba.
Entre risas, empezaron a comer y a celebrar su particular Día de San Martín de Porres, recordando al entrañable Fray Escoba. Sin duda, la mejor manera de conmemorar la importancia de la labor de los que apadrina.