La titular del juzgado de lo Penal número 2 de Ibiza, Martina Rodríguez, dejó ayer visto para sentencia el juicio contra un hombre que hirió a un agente de la Policía Local de Vila al que atacó con una copa rota tras protagonizar una serie de incidentes en la Marina.
Los hechos juzgados ocurrieron la medianoche del pasado 15 de junio, cuando el acusado, un hombre de nacionalidad polaca con antecedentes policiales, se encontraba bebiendo vasos de la terrazas de un bar de la calle Cipriano Garijo y molestando a los presentes por la zona. Según el relato de los hechos el individuo lanzaba los hielos a la gente.
La escena fue advertida por una patrulla de la Policía Local de Vila que se dirigió al hombre para recriminarle su conducta y pedirle que dejase de molestar.
Según la denuncia, el hombre respondió de forma violenta a las indicaciones de uno de los policías al que arrancó la placa identificativa. Tras este primer arrebato, el individuo «rompió una copa» e hizo ademán de clavarle la parte puntiaguda en el cuello del agente. El policía logró frenar el ataque agarrando la muñeca del agresor. No obstante, el policía sufrió cortes en la mano y un fuerte golpe en el codo.
El relato de los hechos añade que con la ayuda del otro agente, el agresor fue reducido y detenido como autor de un delito de atentado a la autoridad y lesiones leves.
Petición fiscal
El Ministerio Fiscal solicita para el acusado una pena de 3 años de prisión por el delito de atentado. Asimismo, por el delito de lesiones solicita una pena de multa de 720 euros (tres meses a una cuota diaria de ocho euros).
Además, en concepto de responsabilidad civil, el acusado debe indemnizar al agente con 1.254 euros por las lesiones causadas y los días de baja.
Por estos hechos el hombre fue detenido y puesto a disposición judicial. Ahora ya espera sentencia.