Pasaban unos minutos de las 09.00 horas de ayer cuando se confirmaba la tragedia. El helicóptero de la Guardia Civil que se había incorporado a primera hora del día al dispositivo de búsqueda de Antonio Ramon Costa, avistaba el cuerpo del vecino de Sant Antoni, de 84 años y enfermo de Alzheimer. La alarma por la desaparición de Tuniet había saltado la noche del jueves cuando alertaban de que no se tenían noticias de él desde la tarde del miércoles.
El dispositivo de búsqueda localizó su cuerpo en un bancal a poco más de 200 metros de su vivienda. Todo apunta que sufrió una caída y un golpe que resultó fatídico.
A media mañana de ayer el retén fúnebre procedió al alzamiento del cuerpo en un punto ubicado entre el Camí de Can Forn y el Camí de Buscastell.
Dron y perros
La búsqueda del hombre se había activado la noche anterior. Agentes de la Policía Local de Sant Antoni, Guardia Civil, Protección Civil y Emergencias rastrearon los caminos por los que el octogenario solía caminar.
El dispositivo puso el foco en las zonas de Can Guillamó, Can Ramonet, sa Vorera y el entorno de la Cooperativa Agrícola de Sant Antoni.
La noche ya era cerrada y el operativo activó el dron provisto de cámara de infrarrojos. La bajas temperaturas elevaba el riesgo de la desaparición.
En torno a las 22.00 horas se incorporaban a las tareas de búsqueda los bomberos con la unidad canina especializada en la localización de personas. Los bomberos mantuvieron el retén durante toda la noche.
Avistado por el helicóptero
Con las primeras luces del día se reincorporaron los efectivos de búsqueda y se sumó el equipo de rescate del helicóptero de la Guardia Civil. Tras avistar el cuerpo del hombre, desde el helicóptero alertaron al resto del operativo. Se encontraba a poco más de 200 metros de su casa.
Según apuntó Pablo Gárriz, técnico director de Emergencias en las Pitiusas, todo apunta a que el hombre cayó por un margen de unos dos metros mientras realizaba uno de los paseos que solía hacer por el entorno.