La Unidad de Cuidados Paliativos de Can Misses atiende actualmente a 60 pacientes, tanto ingresados como en sus domicilios.
De estas personas, siete se encuentran en diferentes unidades de hospitalización y el resto de enfermos reciben estos cuidados a domicilio. «Las personas ingresadas están controladas por los especialistas y por la Unidad de Cuidados Paliativos», explicaron desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera. Este servicio, que trabaja conjuntamente con las diferentes especialidades médicas, está conformado por dos médicos, dos psicólogos y una enfermera.
Según dichas fuentes, los pacientes paliativos que lo deseen, y cuya situación clínica lo permita, pueden ser atendidos en su hogar, rodeados de su familia y seres queridos, con el seguimiento de los profesionales de la unidad de atención extrahospitalaria de este servicio.
Papel importante
Durante este proceso juega un papel muy importante la Unidad de Hospitalización a Domicilio de Can Misses, una alternativa asistencial capaz de dispensar cuidados médicos y de enfermería de rango hospitalario en los propios domicilios, siempre que la situación crítica lo permita. «Tenemos capacidad para atender a 22 pacientes, pero actualmente se está ofreciendo asistencia sanitaria a 16 enfermos», destacaron.
En este sentido, el servicio que está formado por dos médicos y dos enfermeros, se basa en la valoración frecuente y en el control de los pacientes, entre ellos los enfermos paliativos o aquellas personas que se encuentran en sus últimos días de vida.
Asimismo, desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera quisieron destacar la diferencia que existe entre ambas situaciones sanitarias. Mientras que los paliativos se pueden dividir en distintos grados de gravedad y, en muchos casos, están ingresados temporalmente para recibir los tratamientos necesarios, los enfermos que están más próximos a la muerte reciben un tipo especial de cuidados diseñados para facilitarles soporte tanto a ellos como a sus familias. «Estos pacientes tienen habitaciones individuales reservadas para que puedan mantener la intimidad y la privacidad durante todo el proceso», puntualizaron. Actualmente, según dichas fuentes, sólo una persona de las que atiende Can Misses se encuentra en esta fase de su vida.
En este sentido, señalaron que Can Misses apuesta, desde años, por impulsar la humanización de la asistencia sanitaria de los pacientes, convirtiendo la Unidad de Cuidados Paliativos en un modelo referente que cumple con los derechos básicos que corresponden a las personas en esta etapa y se «asegura el cumplimiento de su voluntad protegiendo, entre otros aspectos, el derecho a la intimidad».
Cabe recordar que el servicio de Urgencias del Hospital Can Misses ganó en 2018 la II edición de los Premios Humana con el proyecto Morir dignamente, una iniciativa que tiene el objetivo de ofrecer una muerte digna a los pacientes.