La activación de un sistema de alarma abortó la madrugada del lunes el asalto a una casa de campo ubicada en Can Germà, en Sant Antoni.
Los hechos se desencadenaron en torno a las 02.15 horas del lunes, cuando una central de alarmas alertaba sobre los movimientos registrados en una vivienda.
Hasta el escenario del incidente se movilizó un vigilante de seguridad de la compañía GPS 909 y comprobó que la puerta de la vivienda y de la entrada a la propiedad habían sido forzadas.
El vigilante de seguridad y el propietario de la casa llevaron a cabo una inspección de la vivienda para comprobar si además de los daños causados los asaltantes habían sustraído algo.
En las últimas semanas propietarios de casas de campo de la Isla han denunciado un repunte de allanamientos de morada perpetrados por individuos que van a robar o ocupar las casas.