Decenas de cazadores procedentes de todas las islas se concentraron este martes frente al Parlament balear para exigir la paralización inmediata de la tramitación del Plan de Gestión Red Natura 2000 en Ibiza, un proyecto que prohibirá la caza del tordo, la codorniz y la tórtola en determinadas zonas de la isla.
Unos 15 cazadores ibicencos se desplazaron a Mallorca para participar en la concentración. El delegado insular de la Federación balear de Caza y presidente de los cazadores de Sant Josep, Antonio Reyes, consideró que la protesta «fue muy bien» y destacó que «nos sentimos orgullosos y contentos de la reivindicación que hemos hecho».
«Esta medida no nos gusta nada. Afecta a zonas como Cala d´Hort, Porroig o Cala Llentrisca, más de 3.000 hectáreas de terreno, aunque el Govern diga que es una pequeña zona la que resulta afectada. Hablamos del 33% del coto de Sant Josep que cuenta con más de 9.000 hectáreas y en él venimos realizando una labor de gestión increíble», aseguró Reyes.
El delegado insular reiteró que, tras la caza, hay un trabajo «muy grande» que «ciertos políticos no quieren ver». También criticó determinadas informaciones incluidas en el borrador del plan como las relativas a los tordos. En este sentido, Reyes coincidió con los agricultores de Ibiza que manifestaron el lunes su preocupación por los efectos que puede tener para el campo la prohibición de cazar esta especie.
«Lo que dicen no tiene argumentos científicos. En la zona de Cala d´Hort, durante estos últimos 20 años hemos mantenido una reserva de caza entre el camino a la torre des Savinar y la playa y por voluntad expresa de la asociación. Hace unos años eliminamos esta reserva porque el Consell así nos lo permitió. En este lugar sigue habiendo los mismos pinos, las mismas tórtolas o gorriones que hace 20 años. A qué viene ahora entonces sacar una normativa para prohibir cazar estas tres especies cinegéticas», se preguntó el delegado insular.
Apoyo del Consell de Ibiza
Los cazadores, además de sumarse a la protesta en Ibiza del 30 de abril, secundarán también otra concentración organizada en junio por la Federación balear.
«Es un globo sonda que han lanzado desde el Govern y la cabeza de turco es Sant Josep. Espero que cambien de parecer. Parece que van en contra de los cazadores y últimamente todo se basa en prohibir. No se trata de prohibir, se trata de gestionar», insistió el delegado insular.
El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, expresó a su apoyo a los cazadores ibicencos y aprovechó para criticar esta «nueva imposición y autoritarismo» del Ejecutivo balear.
Para Marí, el Govern está invadiendo competencias del Consell: «No tiene en cuenta la labor de los cazadores que no solo cazan, sino que también se dedican a cuidar el entorno», afirmó el presidente insular.
Los cazadores de Ibiza rechazaron, además, las explicaciones ofrecidas ayer por el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, quien señaló que la prohibición prevista en zonas de Ibiza será temporal. Según aclaró el conseller, estas polémicas medidas siguen determinadas estrategias puesto que la tórtola o la codorniz son especies que presentan un declive «muy importante» de sus poblaciones, lo que obliga a tomar medidas de contención para evitar que entren en el listado de especies amenazadas y en peligro de extinción. También aseguró que recogerán las alegaciones recogidas contra el nuevo plan y llevarán a cabo una evaluación de las mismas.
Valorando las palabras del conseller, el delegado insular de la Federación de cazadores manifestó que la prohibición «de temporal, nada. Lo que se acaba prohibiendo queda así de por vida». Reyes también dudó sobre los datos que maneja el Govern a la hora de señalar que especies como la codorniz presentan un declive «muy importante». «Todo se basa en ideología política», lamentó Antonio Reyes.
Desde la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio añadieron que la prohibición de la caza de estas especies en el ámbito territorial del Plan de Gestión se adopta «porque así nos lo marcan desde la Comisión Europea y el Ministerio de Transición Ecológica debido a la situación de las poblaciones de estas especies a nivel estatal y europeo». Por ello, no se trata de una medida definitiva, sino temporal.
En caso de no adoptarse acciones proteccionistas, para el Govern se correría el riesgo de que la tórtola y la codorniz fueran incluidas en el Catálogo español de especies en peligro de extinción, lo que obligaría a extender la prohibición por toda la isla.
Incluso, desde Conselleria aseguraron que, en relación a la tórtola, hace dos años la Comisión Europea amenazó con llevar a España ante el Tribunal de Justicia de la UE si no adoptaba medidas de protección de esta especie.