Empresarios de las compañías de alquiler de vehículos y ecologistas mostraron este martes su esperanza en que el Consell y los ayuntamientos de Ibiza se hayan propuesto sacar adelante una regulación que permita poner un tope a la llegada de vehículos a la isla durante los meses de la temporada alta. El anuncio lo formuló el pasado lunes el presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, tras la celebración del Consell d'Alcaldes, en el que todos los ediles mostraron su acuerdo con esta propuesta.
El presidente de la Asociación Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin conductor de Baleares (AEVAB), Ramón Reus, mostró su apoyo a este objetivo, asegurando que «aunque hay que estudiarlo profundamente, ahora es el momento ideal porque no hay tantos coches para comprar como antes» Reus, en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, explicó que las compañías de alquiler de vehículos de fuera de las Islas adquieren estos automóviles en grandes cantidades «directamente a las fábricas» y con descuentos de «entre un 30% y un 40%». En su modo de operar, Reus destacó que hacen ofertas «engañosas» a través de internet, con alquileres «de cinco euros al día» que después, con determinados complementos, son más caros de lo esperado por el cliente. «En Consumo hay muchas denuncias sobre esta cuestión», explicó el presidente de la AEVAB, «los clientes se encuentran con que el precio final puede subir entre 200 y 300 euros por encima de lo esperado».
Reus señaló también que está seguro de que una regulación sobre el acceso de vehículos a las Islas en general, y a Ibiza en particular, «sería bien aceptada tanto por los empresarios como por los ciudadanos». Y es que, según los datos que maneja esta patronal, circularon por las carreteras del archipiélago nada menos que 125.000 vehículos de alquiler durante la temporada de 2019. «Sobran más de 50.000», afirmó Reus. En el caso de Ibiza, y según expuso Vicent Marí el lunes, se considera que sobran unos 10.000 vehículos de alquiler en los meses más fuertes de la temporada turística.
El presidente de AEVAB destacó que las empresas radicadas en Baleares «trabajan bien», pero su imagen se ve perjudicada por la actuación de las compañías que vienen de fuera y no tienen los vehículos censados en las Islas. «Los rent a car que lo hacen bien», abundó, «se llevan la fama de los que lo hacen mal». En su opinión, una «regulación autonómica» favorecería el descenso de vehículos circulando por Ibiza y el resto de las islas. Pero también ayudaría a que las empresas del archipiélago pudieran operar en mejores condiciones.
«Hay que intentar evitar que estos 50.000 coches que sobran vuelvan a las Islas», insistió Ramón Reus. Y también explicó que estas empresas de fuera «utilizan los coches aquí para alquilar y, después, para exportar». Un negocio redondo que apenas deja beneficios en Baleares.
Reus puso como ejemplo positivo la regulación adoptada por el Consell de Formentera con este objetivo: «Es un buen ejemplo. Los rent a car de la isla están muy contentos. También los están los ciudadanos porque no hay tantos coches. Y, obviamente, lo está el Consell, que es el que tomó la decisión de regularlo».
Los ecologistas
Por parte de los ecologistas, el presidente del Grup d'Estudis de sa Natura (GEN), Joan Carles Parlerm, considera que la decisión del Consell d'Alcaldes es «una buena noticia». «Es muy positivo que se empiece a pensar en la necesidad de controlar en la isla el volumen de vehículos». Palerm añadió que «es una medida que puede ir en la línea correcta» y aplaudió el hecho de que las administraciones hayan tomado la decisión de actuar al entender que «hay un problema de saturación real de las infraestructuras cuya solución no puede ser siempre incrementar la capacidad de acogida».
El presidente del GEN subrayó, no obstante, que para que esta regulación tenga un buen resultado, es necesario que Ibiza cuente con un sistema de transporte público en condiciones. Algo que ya prepara el Consell. «Hay que regular la demanda», afirmó Joan Carles Palerm, «y necesitamos que se trabaje de verdad en mejorar el transporte público. Y ahí las administraciones locales sí tienen más peso». En este sentido, Palerm apuntó la necesidad de «mejorar las frecuencias y precios». «Esto», concluyó, «es lo que puede ayudar a reducir el problema. No hay una gran solución pero hay que trabajar en esta línea».
El apunte
«Sería necesario tener solo coches para alquilar, no para exportar»
Gisela RevellesEl presidente de AEVAB, Ramón Reus, explicó que uno de los problemas que ha sufrido el sector estos años es el de las compañías de fuera que utilizan los coches de alquiler para posteriormente venderlos. Algo que les lleva a comprar grandes flotas de vehículos con las que saturan las carreteras ibicencas en la temporada alta. «Sería necesario», aseguró en este sentido, «mirar de tener solo coches para alquilar y no para exportar».
En su opinión, el momento actual, con la promoción de los coches eléctricos, sería «ideal» para que las administraciones tomaran la decisión crear una legislación que permita poner freno a este tipo de prácticas.