Tres fallecidos. El cadáver de uno ellos viajaba todavía en la patera y los otros los arrojaron a la mar en plena travesía. Es el balance de la singladura mortal realizada por los inmigrantes auxiliados el pasado día 9 cuando se encontraban en problemas a unas 52 millas de Formentera. La Policía Nacional informó ayer de la detención del patrón de una de las dos embarcaciones y de la ampliación del número de víctimas.
El joven de 21 años y nacionalidad argelina fue detenido como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de favorecimiento de la inmigración ilegal.
La embarcación fue rescatada el pasado día 9 después de ser avistada a la deriva por un mercante. La precaria embarcación se encontraba a unas 52 millas del cabo de Barberia con 18 personas a bordo.
Según las investigaciones habían partido desde la zona de Boumerdes, en el norte de Argelia.
La Guardamar Concepción Arenal de Salvamento Marítimo salió en su auxilio y por el camino se topó con otra pequeña patera en la que viajaban seis personas, una de ellas fallecida. Esta embarcación era «muy precaria y se encontraba semihundida», señalaron las mismas fuentes.
Los dos grupos fueron rescatados y trasladados hasta el puerto de Ibiza.
Prisión para el patrón
En el transcurso de las manifestaciones realizadas por los inmigrantes ante la Policía Nacional, advirtieron que en la barca viajaban ocho personas en total y que habían arrojado al agua los cuerpos sin vida de dos de ellos.
Paralelamente, los agentes identificaron al patrón de la embarcación que llevaba a 18 personas.
Asimismo, de las pesquisas realizadas se averiguó que cada inmigrante había pagado una media de 1.200 euros por el viaje en una embarcación en la que navegaban hacinados, «sin espacio para moverse».
Los supervivientes relataron que habían temido por sus vidas al quedarse a la deriva.
El detenido fue puesto a disposición judicial y se encuentra en prisión provisional.