Los vecinos de la zona de Jesús se vieron ayer por la noche sobresaltados por las intensas rachas de viento que les impidieron conciliar el sueño y obligaron a cerrar puertas y ventanas para evitar males mayores.
En torno a las 03.00 horas de la madrugada el viento arreció con especial intensidad arrojando hojas y ramas de los árboles por el suelo y llegando incluso a mover parte de lo depositado junto a los cubos de basura y elementos decorativos de algunos establecimientos. Un fenómeno que también provocó un importante descenso de las temperaturas nocturnas.
Incluso, durante bastantes minutos las tormentas de carácter eléctrico se dejaron ver en el cielo pitiuso.