El vicepresidente primero del Consell de Ibiza y conseller de Red Viaria, Mariano Juan, el alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, la vicepresidenta tercera y consellera Sara Ramon, la concejala de Forada de Sant Antoni, Maria Ramon, y el técnico de Red Viaria del Consell de Ibiza Toni Marí, se han reunido para pactar el proyecto de mejora de la seguridad en el cruce de Forada, un punto conflictivo donde se había pedido a la Dirección General de Tráfico del Gobierno instalación de un radar, que ha sido denegado, y en el que se tomarán toda una serie de medidas extraordinarias para reducir la peligrosidad de este punto, según han informado desde el Consell este lunes.
Según explican, este cruce se encuentra entre el descampado que se utiliza como aparcamiento, y que los sábados acoge el mercado de producto local, el Bar Can Tixedó y el CEIP Buscastell resulta en un punto de conflicto debido a la salida constante de vehículos aparcamiento, sumado a la gran velocidad a la que circulan algunos conductores, incumpliendo lo que marcan las señales de tráfico (máximo 40 km/h), siendo causa de numerosos accidentes de diferente gravedad.
Por eso el proyecto comportará: una ordenación de las entradas y salidas del aparcamiento existente en la zona, con el objetivo de que las maniobras de los usuarios entrando o saliente del mismo no supongan un entorpecimiento para quienes circulan por la carretera; la instalación de dos pasos de peatones elevados, como elementos reductores de la velocidad; y un reducimiento de la anchura de los carriles en la aproximación a los pasos de peatones.
Además, desde el Ayuntamiento de Sant Antoni han anunciado en la misma reunión que en paralelo a la redacción de este proyecto, se trabaja en la instalación de una luminaria específica para el paso de peatones delantero escuela, dotada de un sensor para que se encienda cada vez que un peatón se acerque para emplearlo.