Solo Madrid y Cataluña generan más alarmas por blanqueo de capitales que Baleares en función de su población. El Centro Registral Antiblanqueo recibió hasta el 15 de octubre un total de 1.227 avisos por parte de los registradores de las Islas. Durante todo el 2021 habían sido 1.521. El decano del Colegio de Registradores de Balears, José Luis Jiménez-Herrera, explica que cada uno de los registros de la propiedad y mercantiles colaboran con el Sepblac estatal. Señala que: «está todo relacionado, es más probable que se blanquee dinero cuando el precio de la vivienda es más alto. Respecto a la población, Balears es la tercera comunidad autónoma en alertas de blanqueo».
Las alertas dependen de algunos indicadores de riesgo. «Hace años había una lista de paraísos fiscales, pero ahora se ha vuelto más flexible. Suiza ya no es hermética y hay otros territorios que son opacos», señala. Así, ahora se basa sobre todo en criterios cuantitativos como los medios de pago, «en caso de que sea en metálico se produce la alerta». Ocurre lo mismo con amortizaciones muy tempranas de hipotecas, precios aplazados sin garantía. «Todo eso hay que comunicarlo. El aviso es confidencial y lleva a elaborar un informe por parte del registrador. Es importante que se conozca que existen controles porque también es una manera de prevenir y desincentivar el blanqueo». En Baleares, como en el resto de España, la mayoría de alertas provienen de operaciones mercantiles. Jiménez-Herrera explica que es normal por el uso de sociedades interpuestas para blanquear. Ahí es donde Madrid y Barcelona acamparan la mayoría de alarmas.
Sin embargo, en ningún otro sitio como en las Islas se producen en proporción tantas alertas por parte de los registros de la propiedad. Hasta noviembre fueron 550; en Madrid, con cinco veces más población, 893. Otra herramienta de los registros para prevenir el blanqueo es el Registro de Titularidades Reales, que obliga a las sociedades a declarar quién es su titular verdadero a la vez que presentan sus cuentas anuales. En este caso está sancionado no cumplir con este requisito.
Jiménez-Herrera afirma que la mayor parte de las alertas que llegan al Centro Registral Antiblanqueo se terminan por descartar. El organismo cuenta con una unidad de análisis que revisa los informes y las alertas. Cruza esas operaciones con otras realizadas por los intervinientes. Tras ese examen, en el caso de que se encuentren indicios sólidos de una operación de blanqueo, se da cuenta de la misma al servicio ejecutivo. El asunto puede terminar en una investigación penal en caso de un posible delito.