Isabel Tur (Ibiza, 1956) es la presidenta de los propietarios de la Unidad de Actuación 12 (UA12) de ses Feixes de es Pratet. Una zona de la ciudad de Ibiza que la izquierda se empeñó en proteger a pesar de que el Ayuntamiento gobernado por el socialista Xico Tarrés había negociado con sus propietarios su urbanización, preservando un gran espacio para la creación de un parque que conservara los principales elementos que dan valor medioambiental, cultural y tradicional a estos terrenos. Los propietarios cedieron al Consistorio más de 8.000 metros cuadrados de suelo, de los cuales 4.313 metros cuadrados debían destinarse a equipamiento cultural y docente. Sin embargo, el Consell gobernado entonces por la también socialista Pilar Costa vetó el acuerdo y, decretando la protección de la zona, abrió una batalla judicial contra los propietarios que se mantiene dos décadas más tarde. Isabel Tur tiene claro que la única solución posible hoy en día pasa sí o sí por el diálogo con el Ayuntamiento. Pero la postura de este, según relata, es la de hacerse con todo este suelo. Tur afirma contundente que no se van a rendir y que no piensan ceder gratuitamente estos terrenos a un Consistorio que, siendo el principal propietario de la unidad, sorprendentemente no cumple su obligación de mantener sus parcelas en condiciones que eviten, por ejemplo, incendios tan graves como el sucedido semanas atrás o la constante presencia de okupas.
—¿Qué es exactamente la UA-12 de Ses Feixes de es Pratet?
—Exactamente, es una de las unidades de actuación que forman parte del conjunto de feixes que se intenta proteger dentro de la zona urbana de Ibiza.
—Ustedes, en el pasado, cedieron terrenos al Ayuntamiento de Ibiza, pagaron impuestos como el IBI… ¿En qué momento se torció todo?
—En un momento determinado, se decide que estos terrenos son urbanos y eso es evidente porque forman parte del frontal de la ciudad frente al mar. Están en una zona urbana y creo que nadie lo puede poner en duda. Se declararon terreno urbano y, por lo tanto, urbanizable. En 2000 empieza todo el proceso con la creación de la Junta de Compensación de la UA12. A continuación se realizan las oportunas actuaciones por parte de los propietarios, consistentes en el pago de más de 50 millones de las antiguas pesetas y la cesión obligatoria de terreno, más de 8000 metros cuadrados, que en 2001 se inscribieron en el Registro de la Propiedad a nombre del Ayuntamiento, contradiciendo algunos argumentos que se han publicado recientemente. Se dijo que se urbanizaría. Pero, en un momento determinado, se decide que estos terrenos hay que protegerlos y que no se puede construir. Y es ahí cuando empieza todo el problema y toda la guerra. Y así hemos llegado al punto de desamparo total en el que estamos.
—A finales de los 90, el Pacte Progressista se presenta a las elecciones con la protección de ses Feixes como uno de sus proyectos estrella. Hablaron de protección, de recuperación de los canales, de huertos urbanos… Pero cuando Xico Tarrés llega al Ayuntamiento, negocia con ustedes esta urbanización.
—Sí, es lo que se negoció. Esto son los cambios políticos y los cambios de sentido que tiene la política con respecto a unos terrenos. Muchos partidos han querido hacer bandera de esto. Pero nadie se ha preocupado realmente de formular soluciones. En Ibiza, hay tres zonas de feixes. Unas son las del Prat de ses Monges. La Administración ha elaborado un Plan Especial de Conservación, Protección y Recuperación de la zona. Se está actuando sobre ellas. Supongo que hay consenso con los propietarios y los ayuntamientos de Ibiza y Santa Eulària para llegar a un acuerdo. Por otro lado, tenemos las feixes que son el aparcamiento de es Pratet. Se trabajó y se llegó a un acuerdo que ha consistido en poner cemento y dar una licencia de actividad provisional. Es un parking. Lo necesitamos, sí, pero es un aparcamiento. Tiene la licencia desde 2010 y en 2014 se les acabó. Esto es lo de menos porque ahí ha habido un acuerdo, con acierto o sin él, y se ha actuado. El tercer grupo es el triángulo que queda. Ahí nadie toca nada. Ahí nadie se ha preocupado de llegar a un acuerdo. Sobre todo, en los últimos años. Los propietarios nos sentimos en una situación de total indefensión jurídica porque no nos dejan hacer absolutamente nada. A raíz del último incendio, he visto en los medios que el Ayuntamiento va a instar a los propietarios a que limpien sus terrenos. ¿Cómo nos va a pedir esto si cuando nosotros lo hemos solicitado nos lo han negado? No nos han permitido nunca acceder a los terrenos. No se nos permitió vallarlos cuando se aparcaba dentro. No nos permiten limpiarlos. No nos permiten hacer nada. En el interior hay algunas construcciones y un propietario solicitó permiso para pintar la fachada. La respuesta fue que no porque esto podría suponer un incremento patrimonial a la hora de valorar esas construcciones. Ahora quieren obligarnos a entrar para limpiar pero hasta hoy nos lo han prohibido.
—Han pasado más de 20 años y ses Feixes son un vertedero.
—¡Es que se nos ha impedido reiteradamente realizar cualquier actuación de mejora!
—¿Y cómo se sienten ante esta situación?
—Indefensos, engañados. Se siente uno arrollado por una serie de banderas que quieren ondear, de protección, de conservación. Pero, a la hora de la verdad, no hacen nada y a nosotros no nos permiten nada. A raíz del último incendio, es posible que si ahora solicitamos un permiso de limpieza o un permiso para poder volver a los cultivos de los años 50, nos lo concedan. Pero será porque estamos en periodo electoral, no nos engañemos.
—Me sorprende que entidades como el GEN o Amics de la Terra, que eran las comparsas del Pacte en esto de la conservación de ses Feixes, ahora se mantengan en un absoluto silencio ante esta situación.
—Quizás ya no quieren hacer presión sobre un tema que a la propia Administración no le interesa. Ahora mismo el problema es de costes. Hacerse cargo de estos terrenos tiene un coste elevado. Ellos lo han calificado de rústico pero eso es urbano. A nosotros no nos han devuelto ni los terrenos ni los 50 millones de pesetas. La UA12 está dispuesta a dialogar con cualquier político pero no a renunciar gratuitamente a los terrenos. ¡Ojalá se pueda hacer ahí una zona verde maravillosa y en beneficio de todo el mundo! Pero no será a costa nuestra. No tenemos porqué ceder los terrenos gratis. Ahora están declarados rústicos. Si nos lo expropian como rústico y luego quieren hacer un parque, se convierte en urbano. Tendrán que indemnizarnos. Y ese es el problema. Además, hay un concepto que ha de quedar muy claro y es el de la desidia que hay en todos los políticos. En nuestro caso, la desidia de la Administración hacia determinadas actuaciones está tratada en varias sentencias.
—Producto de esa desidia es cómo están ses Feixes.
—Exacto. Es un nido de ratas, un estercolero total. Y con el peligro que hay por los okupas que viven allí dentro. Allí hay unos talleres, la zona del mimbre y varios negocios más. Había también un garaje de autobuses que se incendió hace muchos años. Al propietario se le dijo que no reconstruyera porque iba a ser urbano y no valía la pena. Y así va todo.
—¿Qué piden ustedes ahora?
—Nosotros proponemos dialogar. Poder sentarnos a hablar. No someternos a la voluntad o a las ideas más o menos inteligentes o apropiadas que puedan tener algunos políticos. Nosotros queremos dialogar y que de ese diálogo salga algo productivo o algo válido para ambas partes y para los ibicencos.
—¿Desde cuándo no dialogan ustedes con el Ayuntamiento de Ibiza?
—Yo me senté con ellos antes de la pandemia. Lo único que obtuve fue que me dijeran «estos terrenos serán nuestros sí o sí».
—¿Quién le dijo eso?
—Nos reunimos varias personas. Es igual quien lo haya dicho. Es intolerable. Lo de menos es quién lo dijo sino la actitud que tienen de prepotencia cuando hablan contigo. Eso es una imposición. El diálogo ha de ser de tú a tú.
—Es hasta marrullero.
—Totalmente. No esperas esa actitud por parte del Ayuntamiento. La conversación se acabó con esta frase.
—Pero tampoco les plantean ellos una alternativa o una vía para lograr quedarse con los terrenos.
—En ningún momento nos han presentado un plan de actuación. Por aburrimiento no lograrán quedarse con los terrenos.
—Ustedes tenían un proyecto para urbanizar la zona.
—Sí, un grupo de propietarios, no todos los de la UA12. Queríamos ver qué proyecto se podría desarrollar. Y es un proyecto precioso. Lo hicimos en 2015. Solo se hacía construcción en la fachada de la avenida de Santa Eulària y el resto quedaba como zona verde. Al Consell le gustó. Pero el Ayuntamiento ni lo ha mirado. No hay voluntad de diálogo. Quieren imponer su idea. Y hoy en día no podemos aceptarlo.
—Pueden expropiarles.
—Exactamente. Pero pagando como terreno urbano.
—Eso es algo que está claro que tendrá que decidir la Justicia.
—Sí, pero es que nosotros pedimos que haya una vía de diálogo. Si hay que ir a la vía judicial, lo haremos. Si no actúan, seguiremos judicializando el tema porque no se puede permitir esta situación.
—Lo que no es comprensible es que ellos hicieran bandera de la recuperación y la conservación de ses Feixes y luego hayan autorizado un parking inmenso en el que entran y salen miles de coches.
—No tiene ningún sentido. Y en la UA12 esto nos preocupa. Y en el resto de Unidades igual. Por un lado, nos hablan de protección, de humedales, del riego, del alcaraván y la curruca balear… Pero esto no cuadra con el asfalto del aparcamiento. ¿Para unos sí y para otros no? No se entiende.
—Lo del parking no tiene mucho sentido si se piensa en lo que el Ayuntamiento dice defender. Y a eso se suman asentamientos de chabolas cada vez más grandes en el centro de la ciudad.
—Sí, y ahora nos insta a que limpiemos la zona. Ya veremos. Será cuestión de pedir la licencia y ver qué pasa. Nosotros ya pedimos licencia para vallar, para limpiar… y no nos la han dado. Nos piden que limpiemos y luego nos ponen tantos obstáculos que no se puede entrar. Ya sabemos que las cañas son una planta invasiva y que, además, cuando se incendian son muy peligrosas porque son como bombas y explotan. Y esto pone en peligro, incluso, a los bomberos.
—¿Tiene sentido la pasividad de la Administración en una zona en la que ya se han producido varios incendios graves?
—No, pero es que esto tiene un coste tanto económico como político.
—Se ha hecho creer a los ciudadanos que ses Feixes tienen un valor ecológico, cultural y tradicional y esto, a la vista de cómo están y del papel del Ayuntamiento, es muy cuestionable.
—El tema es que todos quieren utilizarlo pero no existe voluntad real de planificar la zona. Lo quieren utilizar como bandera electoral para contentar a determinados sectores. Pero no existe voluntad. Y lo demuestra lo que le contaba antes de las tres zonas de ses Feixes. En ses Monges y en el parking de es Pratet ha habido voluntad de actuar. Aquí no. Dicen que hay que hacer algo pero no lo hacen. Venden que hay que hay que actuar pero no actúan. Y ante esto sientes impotencia e indefensión. Llevamos 30 años que no vamos ni para delante ni para atrás. Son como el perro del hortelano porque ni comen ni dejan comer. Estamos en un limbo.
—La Administración en una situación así juega con ventaja.
—Claro. Para nosotros, insisto, la única solución que ahora vemos viable a corto plazo es el diálogo. Dejemos anuncios populistas y sensacionalistas y sentémonos y dialoguemos. Si pudiera lanzar un mensaje al Ayuntamiento sería ese, sentémonos y dialoguemos. Y que no busquen nuestra renuncia. Vamos a intentar un consenso. Nosotros no estamos en contra de que sea un parque pero el Ayuntamiento ha de actuar en consecuencia. No puede ir lanzando ideas sin sentido porque será un parque si actúan y gestionan.
—Para acabar, ¿qué ha hecho el Ayuntamiento con los terrenos que ustedes cedieron?
—Absolutamente nada. Hace poco se publicó un artículo a raíz del último incendio diciendo que el Ayuntamiento no tiene allí ningún terreno. Pero la verdad es que se le cedieron 4.313 metros cuadrados de terreno para equipamiento cultural y docente; 848 metros cuadrados para un vial peatonal y otros 3.029 metros cuadrados para la red viaria. El Ayuntamiento es, en extensión, el principal propietario de la UA12. Sin embargo, ni asiste a las reuniones, ni participa de las inquietudes de los propietarios. Esperemos que el próximo equipo de gobierno sea receptivo ante un problema que afecta a toda la ciudadanía. La imagen que dan esos terrenos es deplorable. Los propietarios estamos dispuestos a corregir esta imagen de la mano de la Administración cuando asuma que tiene que actuar con respeto a nuestros derechos.