El Ayuntamiento de Sant Antoni y el Govern mantienen en estos momentos negociaciones para tomar una decisión sobre el puerto de este municipio. Así lo ha señalado el alcalde, Marcos Serra, en una entrevista en el programa Bona Nit Pitiüses de la Televisió d'Eivissa i Formentera (TEF) en la que ha explicado que ambas administraciones estudian ahora la posibilidad de la reapertura de este puerto al tráfico de pasajeros y vehículos. Serra ha dejado claro que, en su opinión, si esto se aprueba, las mercancías deberían circunscribirse a pequeños camiones y no a los contenedores.
El primer edil ha explicado que la posible reapertura del puerto al tráfico debería llevarse a cabo con condicionantes. Así, ha señalado que deberían hacerse análisis a diario de la calidad del agua de la bahía y del aire. Además, considera que sería necesario operar con barcos de turbina y no de hélices y regular la velocidad de los mismos en su aproximación al puerto para evitar poner en riesgo a los bañistas. A esto ha sumado el primer edil otros condicionantes como el establecimiento de horarios de llegada que fuera de las horas punta y medidas para «velar por la bahía».
Serra, por otro lado, se ha referido en la misma entrevista a la situación de la vivienda en este municipio. Así, ha explicado que en estos momentos se están construyendo diversas promociones que han podido ejecutarse gracias a la labor llevada a cabo en la anterior legislatura para desatascar el colapso del departamento de Urbanismo. El alcalde, además, ha lamentado las dificultades de aplicar el decreto de emergencia habitacional en esta población pues, según ha señalado, contiene medidas que Sant Antoni ya había aprobado años atrás como la de la reconversión de locales comerciales en vivienda. «Tiene pocos efectos en Sant Antoni», ha dicho, «creo que tienen que darle una vuelta porque es difícil de aplicar. En Sant Antoni ya están muy mezclados los turistas con los residentes y no se puede seguir haciendo esto».
En lo que al turismo se refiere, Marcos Serra se ha mostrado muy satisfecho por la promoción llevada a cabo por Sant Antoni en la última edición de Fitur. Además, ha subrayado la importancia de que el municipio haya participado por cuarto año en la prestigiosa feria gastronómica Madrid Fusión. Serra ha recordado que fue un restaurante de Sant Antoni, el Estragón, el primero en obtener una estrella Michelin en la isla de Ibiza. Además, en 2023 otros restaurantes y establecimientos de hostelería han sido galardonados por Repsol. «Estamos en la primera división», ha dicho, «tenemos muy buenos productos en la isla y en Sant Antoni. Hay la mejor materia prima y eso hay que promocionarlo».
Serra considera que la gastronomía debe ser tratada como un factor de atracción, sobre todo fuera de la temporada alta. Es la gastronomía, junto a otros atractivos como el paisaje o las pruebas deportivas, la que está facilitando, además, un cambio en el tipo de turista que visita el municipio. Así, según ha explicado, el Ayuntamiento se está esforzando sobre todo en hacer campañas promocionales destinadas a los mercados del norte de Europa. Marcos Serra, sin embargo, ha dejado claro que el cambio de modelo turístico de Sant Antoni, que ya se está llevando a cabo, no es posible sin la participación de la iniciativa privada. En este sentido, ha recordado la importancia que ha tenido la apertura de dos hoteles de cinco estrellas y la construcción de otros tres que comenzarán a operar próximamente.
Sobre la imagen de Sant Antoni como municipio problemático, Serra ha admitido que le duele pero también ha recordado el esfuerzo desarrollado por el Consistorio bajo su dirección para acabar con ella. Así, ha puesto como ejemplo el trabajo desarrollado en el West End y proyectos como el del bulevar que unirá la zona de la puesta de sol con el centro urbano. Un bulevar que, ha dicho, tendrá también «un paseo de la fama».
El alcalde, finalmente, ha explicado que para este año el Consistorio destinará 1 millón de euros a la reconversión de locales del West End. El año pasado se dedicaron 230.000 euros a este objetivo y se acogieron a las ayudas siete establecimientos. «No tuvo la acogida esperada», ha admitido, «pero fue un primer paso. Yo seguiré invirtiendo en el West End».