A propuesta de la concejal de Podemos Guadalupe Nauda, el Pleno del Ayuntamiento de Ibiza ha aprobado este jueves por unanimidad la modificación de las fechas de pago de los impuestos municipales con el fin de «ayudar a las familias» a hacer frente a este gasto. Hasta ahora, el pago de estos impuestos se concentraba entre los meses de septiembre y diciembre, coincidiendo con otros gastos importantes para las familias como el del retorno a las aulas o la Navidad.
«Hay que cambiar las fechas para que no sea tan costoso para las familias», ha señalado Nauda. La concejal de Podemos ha recordado que, además, muchas de las familias que residen en el municipio dependen de trabajos temporales y el pago de estos tributos coincide con un periodo en el que ya ha acabado la temporada turística. Una situación que también ha tenido en cuenta el Gobierno de Vila a la hora de aceptar la petición de la edil podemita. En este sentido, la responsable del área, Gemma Marí, ha explicado que impuestos como el IBI o el de residuos «tienen una gran relevancia para las arcas municipales porque son un tanto por ciento muy elevado de los ingresos de un ayuntamiento». Sin embargo, ha subrayado Marí, «esto no debe estar por encima de las necesidades de las familias del municipio».
Con esta propuesta, el periodo de pago voluntario de estos impuestos, actualmente fijado entre los meses de agosto y noviembre, pasará a ser de julio a septiembre. Una modificación de plazo que, según ha señalado la concejal de Hacienda, afectará al pago del IBI urbano y rústico, a la tasa de recogida de basuras, al impuesto sobre vehículos y al de actividades económicas. Además, quienes tengan domiciliado el pago de alguno de estos tributos, verán reflejado el cobro en sus cuentas bancarias el 2 de agosto.
La moción, por otro lado, contempla también la posibilidad de fraccionar el pago de estos impuestos. Algo que ya puede hacerse a través de la sede electrónica del Consistorio pero que ahora quedará fijado con los siguientes plazos para quienes lo soliciten antes del próximo 30 de abril: un 30% en mayo, un 40% en agosto y un 30% en octubre. Este aplazamiento solo se hará efectivo en el caso de que los impuestos municipales se paguen por domiciliación bancaria.
El Pleno, por otro lado, ha dado luz verde a la nueva ordenanza que regula la recogida de residuos en la ciudad y que introduce como novedad el concepto de «limpieza viaria». Se trata de una nueva normativa municipal que, entre otras cuestiones, incrementa de forma notable las sanciones para los incívicos y fija como obligatorio que los dueños de mascotas porten, además de la bolsa para recoger los excrementos, una botella con líquido limpiador para actuar contra los orines. El concejal de Limpieza, Jordi Grivé, ha defendido la nueva norma señalando que si los residentes en Vila quieren «dar un paso más hacia la limpieza de la ciudad, es necesario tener las cosas claras».
Durante la sesión plenaria se ha dado luz verde también a la moción presentada por el PP para instar al Gobierno central a ceder al Consistorio el solar propiedad del Ministerio de Defensa ubicado en Puig des Molins. Además, se ha dado luz verde a una modificación del Plan General de Ordenación Urbana, aprobado el año pasado, con el fin de instalar una cubierta en las pistas deportivas de Figueretes. Este punto ha generado un intenso debate entre el edil de Urbanismo, Juan Flores, y el socialista Rafa Ruiz. Flores ha defendido esta modificación apelando a que es la primera de las que se realizarán sobre el plan a lo largo de la legislatura. El concejal ha dejado claro que si Vila ha acelerado los trámites para aprobar el plan ha sido por «lealtad» y no porque el PP comparta sus indicaciones: «Esta es la primera modificación de las muchas que haremos para demostrar que este PGOU no nos gusta».
Ruiz, por su parte, ha criticado la decisión de cubrir estas pistas porque, ha dicho, aunque es «una buena iniciativa», aún se desconocen los detalles del proyecto. El exalcalde, además, ha lamentado que el PP «presuma» de haber aprobado el PGOU cuando se ha mostrado siempre en contra del mismo.
Tampoco ha salido adelante la moción del PSOE destinada a redactar una ley que permita limitar el acceso de vehículos a la isla durante la temporada alta. Y es que, tal y como ha recordado la concejal de Movilidad, Blanca Hernández, se trata de una competencia del Consell, cuyo gobierno, presidido por Vicent Marí, ya ha aprobado una iniciativa legislativa en el mismo sentido. Una iniciativa que, ha subrayado, «saldrá de Ibiza y con la ley que quiere Ibiza». Hernández ha dejado claro que el PP comparte la necesidad de limitar este acceso de vehículos pero también ha señalado que las medidas que se puedan adoptar para ello han de ser «consensuadas».
El PSOE, por otro lado, ha presentado una moción relativa a la posibilidad de impartir en el centro de educación de adultos de Vila formación para que los residentes en la ciudad puedan acceder a diferentes oposiciones estatales. Un objetivo que, según ha señalado la concejal de Educación, Catiana Fuster, es positivo pero ante el cual el Ayuntamiento no puede intervenir por carecer de competencias para ello. Fuster ha recordado que este centro educativo «se rige por una normativa que establece la formación que puede impartir» y que no contempla esta preparación. Además, ha negado que en Menorca siga en marcha esta experiencia y ha recordado que ni siquiera el Consell puede, a través del departamento de Educación, actuar en este sentido.