La Guardia Civil ha impuesto la primera sanción penal al participante de una carrera ilegal en la carretera de sa Cala. Una multa que llega tras una denuncia vecinal acompañada de un vídeo en el que se puede observar al denunciado realizando un ‘trompo' con su vehículo en medio de la calzada junto a varios motoristas que observan la acción desde el cruce del Camp d'Aprenentatge.
Unos vecinos que, tras su denuncia ante la benemérita, han visto cómo destrozaban las lunas de dos vehículos aparcados en su propiedad en la madrugada del pasado viernes.
«Estamos comprometidos con la seguridad de los vecinos del municipio. Estos vecinos, gracias su colaboración y valentía, han ayudado a identificar al autor de estas prácticas. Nos tienen a su lado para cualquier cosa que necesiten. Lamentablemente, desde hace muchos años sufrimos estas carreras durante los fines de semana en las carreteras de Portinatx y sa Cala. Un problema que se ha agravado y por el que pedimos ayuda a la Guardia Civil para que ponga fin a estas prácticas ilegales», apunta la alcaldesa de Sant Joan, Tania Marí.
«La Policía Local colabora con la Guardia Civil para erradicar estas prácticas y el resultado es evidente con la primera sanción penal que se ha impuesto recientemente», ha añadido la alcaldesa.
En octubre del año pasado, Tania Marí envió una misiva a la Comandancia de la Guardia Civil de Ibiza y a la Dirección Insular de la Administración General del Estado en la que reclamó la adopción de las medidas oportunas para poner fin a la celebración de estas carreras ilegales y garantizar la seguridad de los residentes de Sant Vicent de sa Cala.
La práctica habitual de estos infractores es circular a una velocidad extrema, realizando adelantamientos peligrosos en curvas y lugares con nula o escasa visibilidad, poniendo en peligro al resto de usuarios de las carreteras, a los que obligan a realizar frenazos bruscos o maniobras para esquivar a los motoristas y conductores pudiendo provocar con su conducta graves accidentes
Tania Marí subrayó la importancia de preservar la paz y la seguridad en la comunidad, y la necesidad de actuar de manera inmediata para evitar cualquier incidente grave que pueda derivarse de estas actividades ilegales. «Los vecinos de sa Cala y del municipio en general tienen nuestra mano tendida, nos tienen a su lado y trabajamos para poner fin a este grave problema».