A punto de cumplir 21 años, Mireia Costa lleva casi dos sumida en la depresión tras recibir un diagnóstico de lupus. «No lo llevé bien», explicó este miércoles en el hospital de Can Misses, donde relató su experiencia en el programa de deporte Sport2Live, que se presentó ante los profesionales sanitarios. Un programa llevado a cabo por la Fundación Sport2Live en Cataluña, Castilla-La Mancha y Baleares y que, en el caso de Ibiza, comenzó a funcionar el pasado mes de octubre. Desde entonces, 18 personas con problemas de salud mental de las Pitiusas trabajan para normalizar sus vidas a través de la práctica deportiva.
La joven recordó que en Can Misses la «ayudaron» y que fueron los profesionales del centro hospitalario ibicenco los que le hablaron de este programa. Antes había practicado deportes como la natación o el fútbol sala, pero «con la depresión lo deje todo», explicó. «Yo soy una persona a la que le cuesta salir de casa, me recluyo», admitió sonriente, «pero decidí intentarlo y aquí estamos dos meses después. Me gusta bastante».
Dos días por semana, de la mano del entrenador, Jordi Planells, esta joven ibicenca y sus compañeros realizan ejercicios de fuerza y un deporte concreto. Este mes ha tocado tenis. «No es solo rutina de físico», explicó ante la mirada sorprendida de la consellera de Salud, Manuela García, quien destacó en varias ocasiones la valentía de esta joven a la hora de relatar su experiencia ante los medios. «A lo mejor no vengo todos los días», prosiguió Mireia, «pero voy cogiendo la rutina. Ahora vengo más. Mi familia me anima a venir. Aquí hacemos grupo, hablamos con el entrenador, con los compañeros, que están pasando lo mismo que tú. Esto te hace sentir bien porque vas cambiando tu rutina monótona y sales de ese bucle».
En estos momentos, son los profesionales de Salud Mental los que derivan a los pacientes a este nuevo servicio que, en palabras del presidente de la fundación, Eduardo Torres, coloca al deporte al lado de salud y no solo del ocio. Una combinación que, aseguró, permite «facilitar la recuperación de las personas». La vicepresidenta de la entidad, María Rovira señaló, por su parte, que este programa comenzó a implantarse en 2021 en el Hospital de Son Llàtzer y hoy se va extendiendo por los centros sanitarios del archipiélago con el respaldo de la Conselleria balear de Salud. «Se crea un espacio de protección en el que los usuarios se sienten cómodos», destacó Rovira. Y esto permite, además, que al acabar el programa hayan incorporado el deporte como un hábito y lo practiquen en otras entidades. Ahora llevan a cabo este programa en el pabellón de Can Misses, donde trabajan de la mano de Jordi Planells, quien admitió que, al principio, «costó un poco arrancar». A partir de Navidades, añadió, «el grupo se ha ido haciendo más estable y van subiendo los participantes».
Para Mireia Costa, esta alternativa es «una buena iniciativa» porque los problemas de salud mental «están un poco ocultos». «Esto es bonito y es bueno para nuestro grupo», prosiguió, «es un poco como un método de escapatoria que nos ayuda a salir y relacionarnos. Puede que sea lo único que nos anima a salir de la monotonía que tenemos en casa».
Ella es el mejor ejemplo de los beneficios de una estrategia terapéutica que la consellera García considera que debe formar parte de una atención multidisciplinar para estas personas. Manuela García, que vive «muy de cerca la enfermedad mental», tiene claro que su conselleria debe tener como prioridad la atención a estos usuarios, pero también la prevención de los problemas. Por ello se han activado diferentes programas de prevención del bienestar emocional y de fomento de los hábitos de vida saludables.
«Yo vivo muy de cerca la enfermedad mental», subrayó la consellera, «y cualquier persona con enfermedad mental tiene que tener un sitio en su comunidad. Hay que luchar contra el estigma». Y añadió: «El deporte es un factor muy importante para adecuar el resto de terapias». Y por ello el programa de la Fundación Sport2Live «se extenderá a toda Baleares antes de final de año».
Mireia Costa se despidió de los medios con un mensaje de esperanza: «Por muy mal que lo estés pasando, siempre va a haber alguien que te entienda. Habrá muchos profesionales que te van a ayudar. A veces, nos cuesta abrirnos a los demás, pero no hay que esconder que tenemos algo».